Vía El Economista por Ernesto Piedras
Las telecomunicaciones móviles registran como de costumbre una continuada trayectoria alcista, a partir de la renovada relevancia de la conectividad ubicua y permanente, las mejores condiciones de disponibilidad, asequibilidad y calidad de los servicios, así como derivado del repunte macroeconómico.
Al respecto, la economía mexicana creció a una tasa anual de 3.7% (INEGI), nivel superior a las expectativas de organismos internacionales y autoridades gubernamentales. Esto nos coloca en una proyección de crecimiento mayor cercana a 3% para todo el año en su totalidad.
Efectivamente, el característico dinamismo procíclico del mercado de telecomunicaciones móviles medido por los ingresos generados por los operadores, registró una tasa de 4.1%, superior a la de la economía en su conjunto.
Dinamismo por componentes. Durante el segundo trimestre de 2023 (2T-2023), el conjunto de estos proveedores generó de ingresos por $83,394 millones de pesos (mdp). Destaca el incremento en la comercialización de servicios de voz y datos al repuntar 6.3% en su comparativo anual ($59,886 mdp).
En franco contraste, el componente correspondiente a la venta de equipos descendió (-)1% en términos anuales, explicado por el crecimiento en la huella de mercado de los Operadores Móviles Virtuales (OMV) que en su mayoría no comercializan smartphones, así como por la creciente migración de su adquisición en plataformas de comercio electrónico, tiendas departamentales y/o de autoservicio.
Contratación y consumo de servicios. Hoy la totalidad de la población dispone de un celular, tal que el número de líneas activas alcanzó un total de 139.3 millones, 4.2% más que el año previo.
Esta contabilidad equivale a una penetración o teledensidad móvil de 110.2%, como proporción de la población total del país.
En su segmentación por modalidad, el prepago y el pospago registraron desempeños similares, con crecimientos anuales de 4.0% y 5.0%, respectivamente. Así, 82.5% de las líneas del mercado corresponden a aquellas que realizan recargas y el 17.5% restante corresponden a pospago.
En su distribución por operador, el agente económico preponderante (AEP-T, Telcel) ostenta la mayor proporción de líneas con 59.7% del total (83.2 millones), seguido de Telefónica Movistar con 16.9% del mercado (23.6 millones de líneas estimadas) y AT&T con una cuota de 15.6% (21.6 millones).
La creciente preferencia por los OMV los ha llevado a sumar en su conjunto una razón de 7.8% del total, con 10.8 millones de líneas.
Por su parte, el gasto promedio mensual por usuario en servicios (ARPU por sus siglas en inglés) ascendió a $138.7 pesos y aumentó 1.2% en su comparativo anual. Este crecimiento se explica por un creciente consumo de datos móviles (6.1 GB en promedio al mes), impulsado por el crecimiento en la base de equipos de gama media y alta, la mejora tecnológica (migración 4G-5G) y el abaratamiento relativo de los servicios, que se tradujo en un incremento de 14.5% anual en el consumo GB por usuario.
En suma, el mercado móvil continúa en su prociclicidad, al registrar un crecimiento mayor que aquel de la economía en su conjunto y su importancia es cada vez más manifiesta en la operación económica y social, acompañados de mejoradas condiciones de acceso para los consumidores.
No obstante, para asegurar la continuidad de este panorama en el futuro, es imprescindible fortalecer, aplicar y verificar el cumplimiento efectivo de las medidas enfocadas a gestar un ecosistema competitivo del mercado e incentivar el aprovechamiento del espectro radioeléctrico disponible, al tiempo, que se reconsidera el enfoque recaudatorio que abone a reducir los costos asociados a su asignación y utilización, al ser un insumo esencial para las telecomunicaciones móviles.