Es comprensible la necesidad de reformas fiscales para incrementar los ingresos pero es indispensable que simultáneamente se contribuya a reactivar la economía y a la recuperación del empleo para enfrentar adecuadamente la adversidad del entorno económico actual. En el caso de la propuesta de IEPS a los Servicios de Telecomunicaciones se tendría un efecto adverso, ya que las telecomunicaciones y en especial el Internet se han convertido en herramientas fundamentales para acceder al conocimiento y al desarrollo, impulsan el avance y la competitividad de todas las actividades económicas así como la productividad en varias ramas más del quehacer de nuestra sociedad.
Por esta razón, actualmente más de 30 países persiguen estrategias para su desarrollo, financian e incluso hasta subsidian la infraestructura de banda ancha y el Internet (antes lo hicieron con la telefonía), mientras que en nuestro caso se propone gravar con impuestos adicionales. Es importante considerar que el PIB se incrementa 1.38 puntos por cada 10% de crecimiento en la penetración de la banda ancha (Banco Mundial, agosto 2009, dato para economías en desarrollo).
Las organizaciones que suscribimos conscientes de la responsabilidad, proponemos contribuir de mejor manera a superar la coyuntura económica, pero no con gravámenes que frenen el desarrollo, sino con formas más creativas que a la vez que incrementan los recursos del Erario, promueven una mayor competitividad y productividad:
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- Llevando a cabo las licitaciones de las bandas de 1.7, 1.9, 2.1 y 3.5 GHz que fueron anunciadas en el DOF desde el 18/10/07 (en 1999 se obtuvieron alrededor de 1,000 millones de dólares).
- Licitando las múltiples fibras ópticas oscuras, actualmente ociosas, que ha tendido la CFE y que alcanzan más de 21 mil kilómetros (sólo se ha anunciado la licitación de un par).
- Realizando otras licitaciones en segmentos de frecuencias disponibles como 700 MHz y 2.3 a 2.4 GHz.
- Eliminar empresas que ofrecen servicios de telecomunicaciones sin concesión ni pago de impuestos.
- Emitiendo regulación efectiva que estimule la demanda.
Además, se puede apoyar eficazmente los esfuerzos del Gobierno procurando ahorros, al:
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- Disponer de innovadores servicios digitales de gobierno, automatizados y accesibles remotamente.
- Adoptar nuevas tecnologías convergentes que se prestan con menores tarifas.
- Reducir el número de viajes con el uso de la videoconferencia y de la telepresencia.
- Propiciar un mejor control del consumo en servicios de comunicaciones mediante las facilidades que brindan las redes inteligentes de los operadores.
- Evitar la duplicidad de funciones entre SCT y COFETEL.
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El IEPS debiera desincentivar el consumo de productos suntuarios o dañinos, con efectos contrarios a la salud, al ambiente, al interés público o que atentan contra los recursos no renovables.
Las telecomunicaciones lejos de ser perniciosas o un lujo, son una industria limpia, además son eficaces mejorando la calidad de vida, el acceso remoto a educación, salud, seguridad, comercio electrónico, servicios financieros, de gobierno y al entretenimiento. Son la infraestructura de las infraestructuras y muestran un crecimiento entre 2 y 4 veces más que el promedio de la economía en general.
Los usuarios y concesionarios de los servicios de telecomunicaciones ya contribuyen con IVA, ISR y el IETU, derechos de vía y por uso del espectro, además de generar entrada de divisas por una balanza comercial favorable.
Cuando en ocasiones anteriores para los presupuestos de 1999, 2002 y 2003 se pretendió establecer este IEPS, el PRI, PAN y PRD, mediante comunicados de prensa y desplegados se manifestaron en contra y lo desecharon.
¡Hay maneras más eficaces y con visión de largo plazo de obtener mayor recaudación fiscal y a la vez lograr ahorros e incrementos en la productividad con las telecomunicaciones!
AMCORE, AMCOT, ANATEL, CANIETI, CIDE, CIU, CIRT (Nuevas Tecnologías), CONCAMIN, COPARMEX, FMD, IMPCO, IDET, IMT (Contact Forum)