La conectividad en México registra un avance acelerado hacia al denominado acceso universal, tal que en 2022 se registran 93.1 millones de usuarios de internet, 78.6% del total de la población en edades de 6 años o más, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2022 del INEGI en colaboración con el IFT.
Precisamente, en el último año incrementó 4.0% el número de internautas y 3.0 puntos porcentuales (pp) en términos de adopción en su comparativo con las cifras de 2021.
No obstante, 21.4% de la población permanece en estado de desconexión permanente o discapacidad digital, circunstancia que les impide aprovechar las herramientas, información y aplicaciones disponibles en internet, para sus fines laborales, educativos, comerciales, de relacionamiento social, etc.
Brecha de Conectividad: Dos Méxicos. En la revisión de la segmentación en ámbitos rural y urbano, la ENDUTIH deja ver una persistente brecha en términos de la población desconectada.
Si bien la magnitud se ha reducido en el tiempo, se registra aún un diferencial de 21.5 pp, al registrar una adopción de la conectividad de 62.3% y 83.8%, respectivamente. Le evidencia reiterada es efectivamente, la persistencia de los dos ‘Dos Méxicos’ en materia de conectividad, referido a las diferencias significativas en términos de acceso al internet, derivado de las apremiantes necesidades económicas, de cobertura y aprendizaje de habilidades digitales que enfrentan diferentes segmentos territoriales y poblacionales.
En el ámbito estatal, destacan Baja California (89.8% de la población conectada), Ciudad de México (89.7%), Aguascalientes (86.9%), Nuevo León (86.1%), Sonora (85.9%) y Colima (85.3%), con los registros más elevados que se aproximan aceleradamente a niveles de adopción total y que superan el promedio nacional (78.6%).
En contraste, Chiapas (56.7%), Oaxaca (62.5%), Guerrero (67.5%) y Michoacán (67.9%) registran un rezago persistente en conectividad y se encuentran sistemáticamente por debajo del promedio nacional.
Otras Brechas Relevantes. Otra diferencia significativa y que indica una brecha en el acceso a la conectividad, se identifica en la segmentación de la población por rangos de edad.
Ahí, en la brecha generacional prácticamente todas las personas en edades de 18 a 24 años son consideradas usuarias de internet (96.1% del total), mientras que aquellas de 55 años o más registran un nivel de adopción por debajo del promedio nacional y menor a la mitad del total (47.6%). Otra métrica relevante es el tipo de conectividad con la que se cuenta, mientras que 95.4% de los internautas tienen una conexión a internet en el hogar, tan sólo 54.9% accedieron a la conectividad ubicua, al disponer de cobertura y disponibilidad de datos móviles. Circunstancia que apunta a una brecha de capacidades de conectividad.
También se observa un diferencial significativo en el uso de aplicaciones, puesto que en su vasta mayoría los internautas utilizan internet para comunicarse (93.8% del total), acceder a redes sociales (90.6%), entretenerse (89.6%) y buscar información (89.3%). En franco contraste, la compra de productos o servicios (30.6%), la realización de pagos vía internet (26.9%), operaciones bancarias en línea (24.4%), la utilización de servicios en la nube (23.0%) y ventas por internet (11.3%), son las de menor ocurrencia.
Todo lo anterior, apunta a un diferencial de capacidades y/o habilidades con las que disponen los usuarios para la realización de las actividades referidas.
Esta circunstancia advierte una nueva disparidad o dimensión de ‘Dos Méxicos’ en términos del uso y aprovechamiento de la conectividad entre la población.