Por Gonzalo Rojon
La semana pasada el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) publicó su visión regulatoria para el periodo 2019–2023. Dicho documento tiene como objetivo identificar las líneas de acción regulatoria que el Instituto prevé adoptar durante ese lustro.
La publicación de ese documento es de mucha relevancia ya que, además de que es una práctica común de los órganos reguladores de comunicaciones más desarrollados en el mundo (algo de lo que careció el sector antes de la creación del IFT), proporciona certidumbre sobre el rumbo que tomaría su regulación.
El documento parte de cinco ejes principales en los que se enfocarán las acciones del periodo 2019-2023.
· Infraestructura e insumos esenciales
· Administración del espectro radioeléctrico
· Desarrollo de Internet y regulación de telecomunicaciones en el ecosistema digital
· Derechos de usuarios y audiencias
· Innovación institucional
Si bien los puntos anteriores hacen referencia a temas que constantemente están bajo evaluación y monitoreo por parte del Instituto, es importante resaltar que también integra temas de reciente discusión en el mundo y son relevantes para el desarrollo futuro del mismo.
Por ejemplo, se aborda la mejora de los mecanismos de compartición de infraestructura, pero al mismo tiempo abre la posibilidad de incluir al espectro radioeléctrico como un elemento sujeto de compartición.
Habla sobre la necesidad de Identificar los posibles efectos de las aplicaciones y contenidos ofrecidos por Internet sobre el proceso de competencia en los mercados de telecomunicaciones y radiodifusión. Más específicamente habla sobre la regulación de los servicios OTT así como la necesidad de analizar las implicaciones de su crecimiento en los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión, tema que he
abordado repetidamente en esta columna.
También aborda la posibilidad de considerar al Big Data como un insumo esencial, impulsar la transición hacía el IPv6, la protección de los datos de los usuarios y ciberseguridad, internet de las cosas, desarrollo de la economía digital y el uso, impacto y desarrollo de la Inteligencia Artificial en la sociedad entre otros.
Enhorabuena por el IFT ya que, si bien todavía faltan los cómos para aterrizar las estrategias que harán cumplir los objetivos planteados, este documento sienta un precedente estableciendo un rumbo y dirección para este sector que tiene mucha relevancia en la economía y desarrollo del país.