2021.06.25
Vía El Sol de México
En octubre de 2020, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) anunciaba el inicio de una investigación de competencia en los mercados de servicios de búsqueda en línea, redes sociales, sistemas operativos móviles y servicios de cómputo en la nube, ello originó que hubiera duda sobre qué autoridad debe conocer de la materia, si el IFT o la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE).
Lo anterior, fue analizado por el Primer Tribunal Colegiado Especializado en Competencia Económica y Telecomunicaciones, mismo que ya resolvió, aunque no ha hecho pública la sentencia, sin embargo, la COFECE mediante comunicado adelantó que ella será competente para conocer de los mercados de: servicios de búsqueda en línea, redes sociales y servicios de cómputo en la nube, mientras que el IFT será competente para conocer del mercado de sistemas operativos móviles.
Esta doble ventanilla abonará a que siga existiendo un paraíso regulatorio para las grandes plataformas tecnológicas, ya que se trata de mercados profundamente relacionados, donde la existencia de una doble competencia dará lugar a retrasos, consultas, y por supuesto a eventuales decisiones contradictorias entre las autoridades involucradas.
Un fino detalle que hay que considerar es que, al quedar en manos de la COFECE, las grandes corporaciones de buscadores de internet y de redes sociales podrán gozar de la suspensión en contra de las multas y decisiones de desincorporación hasta que se resuelvan los juicios de amparo que estas empresas interpongan, lo que no hubiera sucedido en caso de que hubiesen quedado bajo el manto competencial del IFT, donde no cabe la suspensión de los actos de autoridad.
Una muestra de que estos temas deben estar bajo una sola autoridad, lo tenemos en el caso americano, donde el Poder Judicial de allá, recién determinó que las grandes tecnológicas deben pagar al regulador de telecomunicaciones, por los servicios regulatorios que les prestan, si bien se trata de sistemas jurídicos distintos, al menos se aprecia que hay una tendencia a que las grandes plataformas estén bajo una sola autoridad especializada en la materia.
Pero en México, siempre es el mundo al revés, nos encanta complicar las cosas y enredarlas, y ahora lo ha hecho un Tribunal Especializado. Esto llevará a un probable choque entre IFT y COFECE, como si las cosas estuvieran muy bien sobre la existencia de los órganos autónomos. En este caso, a la justicia le tembló la balanza y resolvió como diría mi abuela “partió al niño por la mitad”.
