2020.03.13
Vía El Sol de México
La contingencia que representa para México el coronavirus, llamado Covid-19, va más allá del tema sanitario. Tocará aspectos económicos y políticos, que pondrán a prueba a la actual administración pública federal, hasta el momento no se puede determinar –con exactitud- qué tan hondas serán las consecuencias.
De acuerdo a fuentes oficiales, en el país, ya tenemos 13 casos confirmados y 49 pacientes sospechosos, y se prevé que a fines de este mes nos encontremos en una fase de transmisión comunitaria. Recién la Organización Mundial de la Salud declaró que se trata de una pandemia global y Estados Unidos restringió por 30 días los viajes provenientes de Europa, múltiples eventos sociales, políticos, deportivos y artísticos se están cancelando.
En la vertiente económica no sólo se verán afectados el sector turístico, transporte, espectáculos masivos, entre otros, sin dejar de considerar el costo presupuestal para atender la emergencia.
La industria de las telecomunicaciones y radiodifusión no es ajena a los efectos adversos, la reciente cancelación del Mobile World Congress 2020 en Barcelona, la incertidumbre que ronda sobre la celebración de los Juegos Olímpicos, se prevé una reducción en la venta de dispositivos móviles de acuerdo a la Consultora Statista, además de que la enfermedad puede provocar ausencias y paros laborales, así como escasez en mano de obra y suministros, lo que podría encarecer los precios y tarifas en el sector.
Si bien el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) no es autoridad sanitaria, su función técnica regulatoria será esencial para mantener comunicadas a las personas ante una situación de mayor riesgo, pero hasta el momento no ha trascendido ningún plan de prevención y atención al fenómeno en el ámbito de su competencia.
En contraste, el regulador ecuatoriano está promocionando el uso de herramientas digitales en las campañas de información y prevención del Covid-19; la Unión Internacional de Telecomunicaciones está procurando medidas sanitarias para su personal que en razón de su función institucional tienen alta rotación alrededor del mundo, en el regulador inglés, OFCOM, están previendo un crecimiento en la demanda del servicio de internet ante un crecimiento del teletrabajo; mientras que el comisionado Geoffrey Starks, de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de Estados Unidos, refirió que las redes de comunicaciones tienen un papel integral en la respuesta al coronavirus y pidió una acción inmediata, solicitando un plan de “conectividad y estímulo económico” para abordar este reto. ¿Y en México, el IFT ya se contagiaría del síndrome 4T?, todo está bien, son los conservadores.
Son poco entendibles las razones por las cuales el Senado dentro del proceso de elección de presidente del IFT está realizando entrevistas privadas a los Comisionados que aspiran presidir al IFT, cuando tales entrevistas deben ser públicas y transparentes. No existe razonabilidad alguna para ocultarlas y eso que estamos en la era del parlamento abierto.