2018-03-15
Las telecomunicaciones fijas hoy ejercen un rol fundamental para el desarrollo de las telecomunicaciones en México. Vale la pena recordar que este segmento no sólo se trata de la telefonía fija, sino que, a partir de la convergencia tecnológica, contempla tanto la banda ancha fija, como la transmisión de datos provenientes de redes móviles y la televisión restringida.
ADOPCIÓN DE SERVICIOS FIJOS EN MÉXICO
Con la entrada de las telecomunicaciones móviles, erróneamente se auguró una sustitución absoluta frente a la telefonía fija. Sin embargo, al mes de septiembre del 2017 y de acuerdo con el IFT, contabilizan 43 líneas residenciales por cada 100 hogares en México, prácticamente en el mismo nivel durante el último trienio. Mientras que, para las unidades económicas del país, este servicio es imprescindible, tal que 99 de cada 100 unidades económicas cuentan con una línea telefónica fija.
En términos absolutos, las líneas de telefonía fija han oscilado en un rango entre los 19 y 20 millones en la última década para llegar a las 19.2 millones en el cuarto trimestre del 2017. A partir de la oferta competitiva en precios y llamadas por parte de los operadores distintos al incumbente-preponderante, la estructura del mercado pasó de ostentar 89.3% en tenencia de este último operador a 65.5% entre el 4T07 y el 4T17.
Por su parte, la banda ancha fija registra una contratación creciente entre hogares y unidades económicas, tal que cuatro de cada 10 hogares y unidades económicas cuentan con este servicio de conectividad. En el caso de la TV restringida muestra una baja penetración en las unidades económicas debido a su naturaleza como servicio de entretenimiento; sin embargo, dos de cada tres hogares cuentan con ésta.
TRÁFICO Y VELOCIDAD DE DESCARGA EN REDES FIJAS
Si bien en el número total de líneas fijas, como en su contratación, no se registra un cambio significativo, los minutos de tráfico (local, larga distancia nacional e internacional) cursados en redes fijas han caído en promedio 21.1%, mientras que en el caso móvil aumentó en promedio 21.4%, desde el último trimestre del 2014 hasta el tercer trimestre del 2017. Ello, indica una mayor intensificación en el uso del móvil respecto a la telefonía tradicional, a pesar de la introducción de ofertas con minutos ilimitados a destinos nacionales e internacionales a precios bajos.
En contraste, la banda ancha fija registra un dinamismo al alza en su contratación, preferencia y uso, atribuible en parte a la provisión de mayores capacidades de transmisión y velocidad de descarga de datos. De tal manera que, al mes de septiembre del 2017, ocho de cada 10 de las conexiones se ubican en el rango de velocidad entre 10 y 100 Mbps (megabits por segundo), poco más de la razón que alcanzaban las conexiones entre 2 y 9.99 Mbps en agosto del 2015.
Por otro lado, si consideramos que gran parte de la trasmisión de las llamadas y datos de los servicios móviles se cursan a través de las redes fijas y que el servicio de televisión restringida no satelital se benefician de la capacidad de éstas es precisamente por ello que las telecomunicaciones fijas son esenciales para el desarrollo sectorial.
De ahí la importancia del acceso y despliegue de nuevas rutas de las redes de fibra óptica que den soporte proporcional al incremento en la trasmisión de datos de banda ancha fija, de los servicios móviles y la televisión restringida.