2021.05.31
Vía La Lista
En esta lucha extrema por los mejores contenidos y numerosas audiencias, ¿quién gana será el consumidor? Nos toca dejarnos consentir.
En tecnología, la noticia de la semana fue sin duda la compra de Amazon a MGM Studios por 8,450 millones de dólares.
Después de la compra de Amazon a la cadena de supermercados Whole Foods por 13,700 millones de dólares en 2017, esta compra representa un hito como la segunda adquisición más grande en la historia de la compañía, seguida por la compra de servicios de transmisión de video y música del 2020, y el pago reciente de aproximadamente 1,000 millones de dólares por los derechos de transmisión de los partidos de la NFL.
Que Amazon adquiera MGM Studios tiene varios puntos a analizar:
- Lo que está haciendo Amazon es necesario. Netflix sigue creciendo y apoderándose del segmento de contenidos por streaming. Amazon no puede permitirse perder presencia en un negocio que se seguirá desarrollando por los próximos 15 a 20 años.
- Netflix tiene diversas productoras generándole contenidos a nivel mundial, independientemente de que por sí misma sea una productora muy activa. En América Latina, por ejemplo, han establecido todo un ecosistema de producción en los diferentes países en donde ofrece su servicio, de modo que tiene convenios con productoras locales, y les permite crecer, al tiempo que les está abasteciendo de servicios, generando empleos y brindando oportunidades a nuevos talentos.
- Además de tener al mundo entretenido, las plataformas de streaming están creando a corto plazo, un nuevo mercado publicitario en maridaje con eCommerce. Cualquier contenido audiovisual tiene el potencial de volverse publicitario, de tal modo que una sociedad hiperconectada puede adquirir en un instante, la ropa, el maquillaje, parte de los objetos de la decoración del set, con tan solo decir: “Alexa, agrega la lámpara de la escena 12 a mi carrito”, lo pagas y listo, todo sin salirte de la plataforma y ecosistema de Amazon, por mencionar un caso.
- Con esta adquisición, Amazon se apropia de 4,000 películas y 17,000 programas de televisión de la cinematográfica MGM, y de franquicias del potencial de RoboCop, Rocky y James Bond. Esta poderosa capacidad económica se puede salir de las pantallas para convertirse en lugares de entretenimiento offline, para el desarrollo de un nuevo modelo de negocio muy atractivo y competitivo, en donde el contenidos sea una inolvidable experiencia para el consumidor.
- Amazon Prime Video tiene muy poco contenido original; Netflix por su lado lo ha sabido hacer extraordinariamente. En 2021, logró obtener siete premios Oscar, gracias a cinco de sus producciones originales nominadas.
Hace pocos días, Disney+, quien parecía ser imparable, presentó en su último reporte de resultados que dejó de ganar 5.7 millones de nuevos usuarios que estaban previstos, por lo que sus acciones cayeron 5.3%, y se han visto en la necesidad de cerrar más de 130 canales de su programación. Seguramente Amazon no quiere que este escenario de le presente jamás.
¿Qué sigue?
Crear contenido para comunidades hipersegmentadas de usuarios, en donde la tecnología se mezcle con estilo de vida para lanzar puro contenido exclusivo.
Solo así se podrá pelear con Netflix, un coloso de oferta de medios y contenido cuyos últimos ingresos trimestrales aumentaron de 5,770 millones a 7,160 millones de dólares, superando las estimaciones de 7,130 millones, y que hoy suma más de 230 millones de suscriptores.