Guillermo Montero
Diario de México
La frecuencia de 700 MHz ha resultado ser la mejor para proveer servicios de banda ancha móvil ultrarrápida o LTE. En nuestro país está prácticamente libre, salvo por unas cuantas estaciones de televisión que, con el apagón analógico y la transición a televisión digital, la liberarán por completo.
El apagón analógico es un programa necesario para el país, pero lamentablemente ejecutado y descaradamente forzado por parte del presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel). ¿Por qué? Solo él lo sabe. Así como también sólo quienes lograron incorporar en nuestra Carta Magna el mandato de construir una red mayorista en la frecuencia 700 MHz saben por qué lo hicieron. Pero, algo si es seguro: No los motivó el bien del país.
El famoso estudio de a millón de pesos por página, con el cual se “justifica la conveniencia” de una red compartida mayorista en esta frecuencia, claramente expone a los personajes de arriba: en todos los escenarios supone una subasta de espectro únicamente para los operadores actuales; en ningún caso se proyecta al menos un nuevo participante en el mercado de móviles. En contraste, “demuestra” que únicamente si se construye una red mayorista habrá más competencia. Por lo tanto, “concluye” que no es negocio subastar frecuencias, pero sí es negocio construir una red mayorista. El documento ya fue prácticamente plagiado y publicado en la página de la Cofetel como propio.
Entonces, si mis cuates ya forzaron el apagón analógico y la red mayorista en la Constitución, ¿para qué comprar un operador en problemas? Mejor entrarle al negocio multimillonario que nos preparamos desde adentro, ¿no? Ahí se los dejo.