En un acto de rebeldía en contra del monarca, en el siglo XIII, los nobles ingleses obligaron al rey Juan sin Tierra a firmar un documento que comprendía los derechos básicos de los barones y establecía preceptos básicos de pago de impuestos. Con subsecuentes modificaciones y con más de ocho siglos de adaptaciones históricas –que incluyeron la Revolución Francesa, la tradición constitucionalista de Estados Unidos y su adaptación mexicana-, las finanzas públicas de los Estados modernos y democráticos se rigen por el ritual anual del presupuesto público y las disposiciones de ingresos.
Ayer, en el cumplimiento de esa ceremonia constitucional anual, el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, presentó formalmente ante la Cámara de Diputados el paquete presupuestario 2016, que incluye los Criterios Generales de Política Económica, el proyecto de Ley de Ingresos y de Presupuesto de Egresos. Como es costumbre en las negociaciones anuales, en las altas esferas políticas de la Cámara de Diputados estuvo circulando una versión de dichos proyectos para consulta con los principales actores antes del arranque formal del análisis en comisiones que aún no han sido integradas. El trabajo se hizo con hermetismo e incluyó acercamientos entre el gobierno federal y algunos miembros del Congreso.
Destacan en ese presupuesto los temas de inversión en infraestructura, desarrollo social, seguridad pública, energía y telecomunicaciones. Los dos últimos son parte de las reformas estructurales promovidas por el presidente Peña Nieto y éste será el segundo año en el que el presupuesto público se fije para nuevos órganos reguladores autónomos como el IFT, presidido por Gabriel Contreras, y la Cofece, presidida por Alejandra Palacios, con lo que se envía una señal de continuidad presupuestal. Al IFT, el proyecto de presupuesto le asigna dos mil millones de pesos, al igual que el año 2015, aunque en realidad, en términos reales, el presupuesto decrece en unos cuantos puntos porcentuales por la inflación. En el caso de la Cofece, esta institución solicitó 478 mdp ante Hacienda y fue así dispuesto en el proyecto de presupuesto.
Lo interesante será cómo la Cámara de Diputados procesa este paquete. Cada inicio de Legislatura es tradicionalmente uno de los ajustes en la Cámara baja y los diputados entran peleando por membresías en comisiones. A la fecha, las comisiones no han sido formalmente integradas por lo que la llamada “burbuja” de tomadores de decisión dentro de la cámara será la que provisionalmente asumirá el análisis y negociación de este paquete.
CAMBIANDO FRECUENCIAS
Hoy se lanzará al mercado el nuevo Apple TV, un dispositivo conectado que aglomera canales de streaming, renta y compra de películas y programas. Se espera se anuncie un servicio nuevo de paquetes para cortar el cable (cord cutting) y ofrecer canales sin la necesidad de un proveedor de TV por cable o satelital.
En unos cuantos días el IFT estará resolviendo asuntos en materia de competencia económica y uno de los argumentos de los regulados ha sido que los OTT (over the top) deben ser regulados igual que cualquier operador de cable.
¿Será también Apple TV objeto de polémicas regulatorias?
