2o19-01-29
El sector de los medios de comunicación en México está teniendo un reajuste cuyo desenlace es incierto. Esto afecta tanto a medios privados como a los medios públicos (gubernamentales) y se debe a todo tipo de cambios: tecnológicos, ideológicos, de gobierno y de modelo financiero. Así que todo el sector de los medios en México está en proceso de reestructura. Algunos ejemplos:
*Medios públicos: El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció cambios en todos los medios públicos federales: Notimex, canales 11 (IPN) y 22 (Secretaría de Cultura), el IMER, Radio Educación y en lo que será el ente coordinador de todos ellos, el Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR).
Hay que señalar que la dirección en este organismo, de reciente creación, era transexenal, ocupándola Armando Carrillo Lavat. Y es que el Senado de la República le nombró por cinco años, para concluir su periodo hasta finales de octubre de este año, por lo que deja el cargo con nueve meses de anticipación.
Esa renuncia anticipada en cualquier país con medios públicos avanzados hubiera sido una crisis para el gobierno en turno, pero en México no lo fue sencillamente por dos razones: los medios públicos son inexistentes. A pesar de tener cobertura nacional y estar en prácticamente todos los sistemas de TV de paga, nadie los ve. En la parrilla de ratings/audiencia de los 80 canales (nacionales y extranjeros) con cobertura nacional, el Canal 11 tiene la posición más destacada, pero apenas y llega al lugar 48. El Canal 22 ocupa la posición 55.
La segunda razón es que no han logrado fijar una posición editorial clara ni independiente del gobierno en turno. Como ejemplo, el señor Carrillo Lavat se acomodó primero con el PRI y ahora andaba, antes de su renuncia, ofreciendo programas a legisladores de Morena.
El presidente López Obrador ha designado a varios periodistas. Su común denominador es que han sido proclives a publicar notas afines a él, a veces sin mayor sustento. Su mayor riesgo es que, dados sus antecedentes, vayan a tratar de imitar el modelo de medios públicos que han lanzado varios países sudamericanos —señaladamente Venezuela, con TeleSur— y que acaben gastando millones en esfuerzos que desemboquen en la creación de medios partidistas. Su mayor virtud es que en años recientes, cuando en el sector medios se privilegió el dinero sobre la línea editorial, hicieron frente contra este tipo de prácticas.
La idea del Presidente es crear un sistema de medios públicos con estaciones temáticas y coordinado por el SPR, vía Jenaro Villamil, a quien el Senado debe ratificar primero. En teoría, siguiendo el modelo de la inglesa BBC, la americana PBS o la alemana Deutsche Welle.
Así que pronto sabremos si los medios públicos mejoran en su audiencia y si logran, por primera vez en la historia de México, una línea editorial independiente al gobierno en turno.
*Radio Centro: Uno de los principales grupos radiofónicos del país sigue siendo tema de conversación, por las razones equivocadas.
Ahora sus tres estaciones de AM en la Ciudad de México dejaron de operar y se viralizó un video con quejas de sus empleados. Con ello,
la estación de radio icónica Formato 21 (1110 AM), la 609 AM y la 1030 AM dejaron de operar. Radio Centro ha sido ambiguo, pero ha trascendido que los terrenos desde donde transmitían sus estaciones se han vendido a una tienda departamental. Con esos recursos pensarían generar ahorros para lanzar al aire (y evitar ser multados) el canal 8 de TV abierta, en la CDMX, que ganaron hace 17 meses y por el cual pagaron 426 millones de pesos. Esta señal ha disminuido su valor en el tiempo con la entrada de otros canales de TV abierta en la CDMX y lo perderá por completo de confirmarse que el IFT autorizó el cambio de características del Canal 52 a MVS, pasando de ser un canal de TV de paga (codificado) a uno de TV abierta (gratuito). Asimismo, la caída de 20% en el valor de sus acciones en la Bolsa de empresa que prácticamente no cotiza.
*CIRT: La Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión, misma que cuenta con más de mil 200 afiliados, está en proceso de negociar un vetusto “Contrato Ley” que rige a toda la radiodifusión. Si para el último día de este mes no llegan sindicatos y concesionarios a un acuerdo de incremento salarial, estallaría la huelga. Hasta ahora, un tema inesperado es el más conflictivo. Los aumentos salariales dictados en la frontera norte están poniendo en jaque no sólo a maquiladoras, ya también a la radio AM, que cubre grandes extensiones en cobertura, pero cuyas audiencias e ingresos van a la baja. Así que, en la revisión salarial en curso, como en el resto de los temas de medios, la constante es que el rumbo es incierto.
