Cada año desde 1967 tiene lugar la fiesta de los nuevos gadgets, el Consumer Electronics Show (CES), el evento más representativo a nivel mundial en cuanto a electrónica se refiere. En esta ocasión, el evento estableció un récord al superar los 150,000 asistentes de 170 países, más de 3,250 expositores y 20,000 productos presentados.
Pero su importancia no es sólo cuantitativa, sino sobre todo porque se constituye como la fiesta de la innovación, término clave que define los productos y servicios que se dan a conocer en el evento y que marcarán la pauta para la evolución y el consumo próximo o inmediato del homo telecom.
El producto que se ubicó al centro de la interacción de los usuarios es sin duda el teléfono inteligente, que por cierto al cierre del año sólo para México rebasó en números los 22 millones de equipos. Una de las joyas de la corona para próximos smartphones fue presentada por Samsung, con la pantalla enrollable en una caja adjunta al dispositivo. Este tipo de pantallas no sólo son más delgadas y flexibles, sino que permiten un mayor brillo y contraste, además de menor consumo de batería. También destacaron las pantallas flexibles, hechas con tecnología OLED, que utiliza componentes orgánicos para encenderse.
Esta tecnología también estuvo disponible en pantallas de Ultra Alta Definición (UHDTV), que ofrecen una resolución 16 veces mayor a lo que se conoce como alta definición (HD), alcanzando una resolución de 7680×4320 pixeles. Para entender un poco mejor el concepto, basta decir que una pantalla HD cuenta con 2 millones de pixeles, mientras que la UHDTV alcanza 33 millones. Además, se presentaron importantes avances en tecnología 3D, pantallas transparentes, táctiles, con una curvatura que permite una visualización panorámica y, lo más importante, que cuentan con la capacidad de transformar los contenidos existentes en HD a UHD, de modo que no hay que esperar para que los contenidos vengan en esta calidad para poder verlos.
En el ámbito de las smart TV, que cuentan con la capacidad de conectarse a Internet para que el usuario acceda a todo tipo de contenidos; desde música hasta redes sociales, juegos y video, la innovación también se hizo presente gracias a los procesadores quad-core (sí, integrados ya a su televisor inteligente e hiperconectado). Este tipo de procesadores cuentan con cuatro núcleos que le permiten procesar la información a gran velocidad, facilitando incluso sistemas de reconocimiento de voz.
Y es justo en materia de procesadores que se están dando los grandes avances tecnológicos, ya que permiten una amplia variedad de funciones avanzadas en los equipos, especialmente los smartphone, ya que las telecomunicaciones móviles han consolidado el centro de la vida conectada.
Por ejemplo, el nuevo procesador Snapdragon de Qualcomm garantiza un considerable ahorro de batería, permitiendo un mayor uso, ya sea al observar películas en alta definición, escuchar música directamente desde la red, jugar o simplemente navegar en Internet.
Otro importante desarrollo en términos de procesadores lo tuvo Samsung con un procesador de ocho núcleos (¡es correcto, ocho!) para smartphones y tablets, cuya distribución permite que cuatro núcleos especializados se encarguen de los procesos que requieren mayor capacidad de procesamiento, mientras que los otros cuatro estarán destinados a funciones más elementales, lo que permite un ahorro de batería considerable.
Además, estos nuevos procesadores tienen la capacidad de operar muchas aplicaciones a la vez sin detrimento de la velocidad de operación, lo que se conoce como multitasking, pudiendo navegar en Internet, hacer uso de redes sociales o jugar, entre muchas otras cosas, a altas velocidades. Incluso permiten aumentar la calidad del audio y video que transmiten para que el usuario pueda tener experiencias más reales mientras juega y navega en la red, todo en calidad HD y con la posibilidad de transmitirlo en una TV con o sin cables.
Finalmente, la realidad aumentada fue uno de los elementos más destacados en el evento, ya que transporta al usuario a otra dimensión al combinar contenido virtual con imágenes reales, y la mayor ventaja de esta tecnología es que no es exclusiva al entretenimiento, sino que puede utilizarse en aplicaciones de salud, publicidad y desarrollo social, entre otras de gran relevancia para el bienestar social.
Todos estos avances tecnológicos encaminan al homo telecom hacia un mundo hiperconectado, que permite todo tipo de interacción entre dispositivos, desde el smartphone hasta la TV, electrodomésticos y sistemas de seguridad, por mencionar sólo algunos, permitiendo al usuario controlar toda su vida con un clic desde su smartphone. Lo que hace pocos años hubiera parecido ciencia ficción es hoy una realidad, que trae el futuro a nuestras manos a tiempo presente.
Una última pregunta que nos brinca a muchos es ¿realmente queremos un auto, una casa (refrigeradores, televisión, lavadora, cafetera, etcétera), automóvil, reloj, etcétera, todo inteligente? La respuesta corresponde a cada uno de nosotros, pero la ventaja es que los que hoy digamos que sí, lo podemos tener. Los que digan que no, esperaremos a que se convenzan de la conveniencia de estos nuevos equipos de capacidades ampliadas.