Gerardo Flores Ramírez
El Economista
Es importante que la Cofetel tome como referencia lo que han venido haciendo los reguladores europeos en materia de costeo de las redes de telecomunicaciones La semana pasada, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) dio a conocer un documento titulado Gettinglt Right, Una Agenda Estratégica para las Reformas en México, ello en el contexto del evento México Foro 2013, Políticas Públicas para un Desarrollo Incluyente. El capítulo 9 de dicha publicación está dedicado al tema de las telecomunicaciones, y en él, yo diría que la OCDE retoma varias de las observaciones y recomenda ciones con relación a este importante sector, que hiciera en su reporte de finales de enero del 2012. Si bien es cierto que en el capítulo citado se presentan diversas recomendaciones, agrupadas en diversos temas, considero que la más importante de todas ellas tiene que ver con el reiterado pronunciamiento en torno de la falta de competencia en el mercado mexicano. De hecho, dicho capítulo inicia de la siguiente forma: La falta de competencia en el sector de las telecomunicaciones en México ha restringido la posibilidad de tener nuevos servicios, ha dado lugar a precios muy elevados tanto para los consumidores como para las empresas y ha impuesto un costo a la economía. Justamente, en su reporte sobre México del 2012, la OCDE dio a conocer la estimación del costo en bienestar para los mexicanos que resulta justamente de ese marco de escasa competencia, que de acuerdo con esta organización se ubica en 25,800 millones de dólares por año. Por tal motivo, la OCDE menciona algunas iniciativas que se requieren en ma teria regúlate>ria para aumentar la competencia en el mercado y reducir el abuso de poder dominante. De ellas, yo destacaría la propuesta para eliminar la que yo llamaría la doble ventanilla más nociva, que hemos padecido en el sector telecomunicaciones, me refiero a la doble ventanilla entre la Co misión Federal de Competencia (CFC) y la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel). Obviamente la OCDE no habla expre samente de eliminar esa doble ventanilla, pero sí habla de la posibilidad de darle a la Cofetel facultades para definir los merca dos relevantes y declarar a los agentes económicos con poder sustancial en dichos mercados. De lograr dicho propósito, estoy convencido de que estaríamos dando un enorme paso en beneficio de los consumidores de este país, que seguramente se vería reflejado en mejores tarifas y calidad de los servicios, y en un mucho mejor desempeño en materia de inversiones per cápita, rubro en el que México desafortunada mente sigue comparándose muy rezagado frente a otros países integrantes de la OCDE y frente a otros países con niveles de desarrollo comparable al de nuestro país. Evidentemente existen otras medidas para promover un mejor entorno competitivo en el sector al que se refiere la OCDE. En este sentido, vale la pena destacar que en la valoración que la OCDE hace de los compromisos establecidos en el Pacto por México, califica positivamente el relativo a competencia en el sector telecomunicaciones de dicho instrumento, me refiero al compromiso 44. Sobre el mismo, de manera específica la OCDE indica lo siguiente: El trato asimétrico en el uso de redes y establecimiento de tarifas, la regulación de la oferta conjunta de (dos o más) servicios en paquete y las reglas de concentración para la competencia en los servicios de telefonía y datos, como se describe en el compromiso 44, son cruciales en el desarrollo de la competencia y para limitar el abuso del poder de mercado dominante. En este contexto, vale la pena mencionar las inminentes definiciones que está por adoptar la Cofetel en materia del modelo de costos que utiliza para estimar los costos de las redes públicas dé telecomunicaciones, y en consecuencia, para determinar las tarifas de interconexión. Es importante que la Cofetel tome como referencia lo que han venido haciendo recientemente los reguladores europeos en materia de costeo de las redes de telecomunicaciones, que en los hechos, se ha convertido en una importante herramienta para promover la competencia en los mercados de telecomunicaciones de esos países, vía un régimen de tarifas de interconexión asimétricas, basado en el hecho de que las redes de los incumbentes, como Telmex y Telcel en México, operan con menores costos que las redes de los operadores competidores, por lo menos, durante un tiempo razonable en el que los según dos logran expandir su cobertura y logran participaciones de mercado razonables, digamos entre 20 y 30 por ciento del mercado, algo aún muy lejano en nuestro mercado. Valdría la pena que la Cofetel no pase ello por alto.