Javier Tejado Dondé/ Reforma
Cada vez más gente ve más televisión y por más vías. Además de la televisión tradicional o TV abierta, surgida hace más de 50 años, y de la televisión restringida o de paga, que en los últimos 30 años ha ido desabollando distintas vertientes (cable, microondas y satelital), el tipo de televisión que más está creciendo en Europa y en Estados Unidos es la que se transmite por internet.
Con esta nueva modalidad, hoy ya no es necesario contar con un televisor para ver la programación. Basta con tener una computadora, una tableta o un teléfono móvil con conexión a internet para poder acceder a series y películas en cualquier lugar y momento. Los contenidos producidos por las grandes cadenas de televisión o por estudios cinematográficos, incluso las producciones de estudios independientes cuyos programas no son transmitidos por televisión abierta o por sistemas de paga, pueden ser recibidos en estos dispositivos en el momento exacto en que se desea. El avance tecnológico ha cambiado por completo el paradigma de la televisión y los contenidos audiovisuales.
El cambio está siendo tan dramático en el servicio de transmisión en línea por internet (streaming) que en la próxima entrega de los Emmy, la Academia de Artes, Ciencias y Televisión, de EU, abrió la posibilidad de que series por internet puedan ser galardonadas.
Este año, la lista de nominaciones para la categoría de mejor serie no contiene una sola de las cadenas de TV norteamericanas como ABC, CBC, NBC o FOX. En cambio, sí están las series producidas por los estudios cinematográficos como HBO y Showtime, y por primera vez se incluyó un programa de una productora independiente transmitido exclusivamente por internet.
Netflix competirá con tres de sus series originales por 14 estatuillas en las categorías de mejor serie, mejor actor, mejor actriz y mejores efectos visuales. Su serie original “House of Cards” sorprendió al ser nominada a nueve premios. Esta serie política competirá contra “Mad Men” y “Breaking Bad” de AMC, “Downton Abbey” de la televisora pública PBS, “Game of Thrones” de HBO y “Homeland” de Showtime, por llevarse el premio a la mejor serie dramática de la temporada pasada.
Habrá que ver cómo el nuevo Ifetel aborda estos temas, pues las mediciones tradicionales de audiencia que trae la reciente reforma constitucional en materia de telecomunicaciones fueron tan al detalle que están ya siendo rebasadas por la realidad tecnológica.
CAMBIANDO DE TEMA…
Si los maestros de la CNTE no vuelven a cercar el Senado, como aconteció la semana pasada, los siete candidatos propuestos por el Ejecutivo para integrar el nuevo Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) comparecerán el día de hoy ante la Comisión de Comunicaciones del Senado, que preside el panista Javier Lozano. No pasa desapercibido que en 1995 Javier Lozano fue de los creadores de la actual Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), además de haber sido su segundo presidente, y ahora le tocará ratificar a los nuevos Consejeros, con lo que formalmente dejará de existir la Cofetel, para dar lugar al Ifetel.
Entre los radiodifusores del País ha causado molestia y preocupación que la moribunda Cofetel haya dado acceso a toda la información económica, técnica y comercial –de estaciones de radio y TV- a terceras personas que no tenían por qué revisar expedientes con secretos industriales y comerciales. Hay que señalar que la fuga de información que permitió la Cofetel fue en la coyuntura del anuncio del entonces Presidente Calderón- y de la Cofeco- para la licitación de nuevas estaciones de radio y de dos cadenas nacionales de TV. La información a la que se dio acceso a una conocida del presidente Mony de Swaan da una ventaja indebida a quien la tenga sobre otros postores para concesionamiento de frecuencias de radiodifusión.
El proceso de acceso a toda la información de los concesionarios fue tan desaseado y desorganizado que muchos concesionarios están teniendo que reponer información que se extravió de la Cofetel. Pero, además, la Cofetel trató de ocultar el acceso de terceros a sus expedientes y no fue sino hasta que se denunció el tema al IFAI que la Cofetel tuvo que aceptar la entrega de la información a terceros no autorizados. Este será un tema que el nuevo Ifetel tendrá que investigar a fondo, pues habrá que ver quién tuvo acceso a los expedientes. Por lo pronto, sabemos que la información fue a parar a los Estados Unidos, en una coyuntura en la que, por un lado, vienen nuevas concesiones de frecuencias de radio y TV, y por otro, que por primera vez los extranjeros podrán invertir en radio y TV de manera directa. Demasiadas coincidencias, ¿no?
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Director de Información de Televisa y fundador del IDET. El texto no necesariamente representa las opiniones de las instituciones mencionadas.
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