El viernes pasado, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) señaló en el comunicado 100/2016 que no revelaría los nombres de los interesados en participar en la licitación pública de la Red Compartida que le pidieran opinión favorable en materia de competencia económica. ¡Esto es que el IFT no quiere decir quienes están participando en una licitación pública!
No habíamos visto en este país una licitación pública de lo que sea (bancos, carreteras, trenes, puertos, satélites) en los últimos 25 años en la que la autoridad escondiera la información. Pero aún es más raro que el IFT no diga quienes están queriendo participar, pues en sus últimas licitaciones (televisión y banda para uso celular AWS) sí ha hecho pública ésta información. Así, nos enteramos que Radio Centro y Grupo Imagen buscaban la cadena de TV, así como sobre el impago del primero. Pero también que Telcel y AT&T le entraron a la licitación de telefonía celular. Ahora el IFT decide que no hará públicos los nombres de quienes participan en una licitación pública, hasta que haya un ganador.
Cómo creer que el IFT entiende que es una licitación PÚBLICA, si esconde información básica en materia de transparencia y la promoción de la competencia efectiva. La opacidad en este tema es muy grave, pues da sospechas de que están queriendo esconder algo, aunque no sea el caso.
El IFT iba muy bien en materia de transparencia: con consultas públicas a todos los interesados y versiones públicas de todas sus sesiones. También los Comisionados han mantenido una buena apertura para con los medios de comunicación.
Pero ahora, en la licitación más grande e importante de espectro que se ha hecho en la historia del país —y creando un monopolio segmentado, pues habrá un solo ganador en la banda de 700 MHz— el IFT decide mantener en lo obscurito a los interesados.
La historia de la Red Compartida era ya una de polémica. Se mandaron a hacer estudios sin licitación, pagando 100 millones de pesos del extinto regulador de telecomunicaciones —la Cofetel— a una consultoría privada. Estudios que sólo sirvieron para meter el tema al “Pacto por México”. Luego se les reservó una cantidad enorme de espectro (90 MHz) y se les bajaron los derechos un 90% a los interesados. Han puesto una serie de reglas para que el ganador tenga mucho tiempo en desarrollar la infraestructura y ésta ya ni siquiera debe de cubrir en su totalidad las zonas marginadas del país. Lo cual era el objetivo que nos vendieron desde la reforma constitucional.
Pero lo más escandaloso, es que el pasado viernes por la tarde —casi para que nadie se enterase— el órgano regulador sacó un comunicado cambiando la forma en cómo se hacen las licitaciones públicas. Decidió ahora esconder a los interesados en participar en una licitación pública.
Por otro lado, el argumento para reservar la información por parte del IFT queda poco claro. Dicen que porque es un “procedimiento en curso”, sin embargo esa justificación no encaja, ni nunca ha encajado con lo que señala el artículo 113 de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública. No se trata de conocer valoraciones ni puntos de vista, que es a lo que se refiere la Ley, es conocer solamente los nombres de los interesados en participar en licitaciones públicas. Y ahora resulta que hasta eso van a esconder.
El actuar del IFT sólo da margen a ser mal pensados. La opacidad es hoy en día una forma de actuar que ya no encaja con las aspiraciones de los mexicanos. Ojalá el IFT rectifique en favor de la transparencia.
Cambiando de tema:
*Promtel, sin presupuesto: el Instituto del Derecho de las Telecomunicaciones (IDET) dio a conocer en un comunicado, este fin de semana, que en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2017 simplemente no encontró partida alguna que prevea recursos presupuestales para el Organismo Promotor de Inversiones en Telecomunicaciones (Promtel). La creación de éste obedeció fundamentalmente a la necesidad de que el gobierno federal tuviera un ente que participe como socio en la asociación público privada que obtendría el contrato de la Red Compartida. El tema adquiere relevancia justamente en la fecha que los interesados, en participar en la licitación correspondiente, tenían como límite para solicitar la opinión en materia de competencia económica. Así, el “socio” gubernamental de la red compartida no tiene recursos.
Casi al mismo tiempo que se presentó el proyecto de presupuesto para el 2017, que no incluyó recursos para Promtel, este organismo publicó su estatuto orgánico, en el que se detalla cuál sería su estructura administrativa. Así que se sabe ya su organización interna, pero no cómo se va a fondear. ¿Será un error? o ¿tendrá relación con lo que el IFT decidió ocultar?
*INE y los debates: el nuevo reglamento del Instituto Nacional Electoral (INE), para elecciones abre la posibilidad de hacer debates en los medios de comunicación electrónicos. El INE parece ser sensible a que sus debates —dado lo acartanado y formalistas — no están generando audiencias. Algo que la radio y TV comercial tienen más experiencia. Así que dentro de lo aburrido de nuestro modelo electoral, parece ser que el INE empieza a ver los pequeños cambios que la Ley le permite. Enhorabuena.