En la segunda quincena de mayo, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) difundió su informe estadístico correspondiente al cuarto trimestre del 2016. En dicho documento se da cuenta de los avances en diversos indicadores del sector telecomunicaciones, como es el caso de la banda ancha, los servicios móviles o la televisión restringida, por citar algunos. En general, el IFT destacó en ese reporte que los precios de los servicios de telecomunicaciones habían disminuido en comparación con el cierre del cuarto trimestre del 2015.
Sin embargo, en el caso de los precios de la televisión restringida o la televisión de paga como comúnmente se le refiere, el IFT destacó que estos habían mostrado un incremento de 3.2% entre diciembre del 2015 y diciembre del 2016, frente a los demás servicios que habían mostrado decrementos.
Ya antes el IFT había señalado que entre junio del 2013 y diciembre del 2015, televisión de paga, había registrado incrementos en sus precios de 1.9%, lo que significa que un periodo de prácticamente 42 meses, los precios de la televisión restringida se han incrementado en México en un poco más de 5.1%, lo que es menos de la mitad del incremento del Índice de Precios al Consumidor que publica el Inegi, que entre junio del 2013 y diciembre del 2016 muestra que los precios de la economía en general se incrementaron en 12.8 por ciento.
La semana pasada, en el diario Reforma se publicó una nota donde algunos analistas cuestionan el nivel de precios de los servicios de televisión de paga. Esa nota de hecho iniciaba con la siguiente frase: “Las tarifas de televisión de paga seguirán en aumento mientras no exista una competencia real en dicho mercado, advirtieron analistas”. De esta nota se desprenden conclusiones muy fáciles, a partir de los juicios ligeros que hacen quienes fueron entrevistados para esa nota.
Para hacer sus conclusiones, recurren al análisis fácil, el análisis fuera de contexto. Lo anterior lo afirmo porque nos quieren hacer creer el hecho de que los precios de los servicios de televisión de paga se hayan incrementado en México como lo refirió el IFT. Es verdad que el insumo principal de los servicios de televisión de paga es la programación que adquieren de terceros, principalmente del extranjero, lo que significa que hay que pagar en dólares, cuyo precio denominado en pesos se incrementó entre el 2013 y el 2016, lo que conocemos como depreciación del peso. En esa tesitura, la depreciación del peso frente al dólar impactó los costos de corto plazo de los proveedores de los servicios de televisión de paga en nuestro país, pero no es el único factor que explica el crecimiento de los precios. Está también el costo de la programación que no sólo se ha incrementado en pesos, también en dólares.
Ahora bien, el incremento en los precios de los servicios de televisión de paga no es exclusivo de México. Por ejemplo, entre el 2004 y el 2014, de acuerdo con la FCC de los Estados Unidos, los precios de la televisión de paga en ese país se incrementaron en promedio en 4.8% por año. Entre el 2014 y el 2015, los precios de este servicio se incrementaron en 2.3 por ciento.
Lo mismo ha ocurrido en el Reino Unido o España. La razón de estos incrementos está relacionada directamente con los costos de la programación, un costo de corto plazo. Así que si quieren hacer análisis de los precios de la televisión de paga, bien valdría que quien se precie de ser analista, analice también que ha ocurrido en el mismo tiempo en otros países. Lo anterior también es una sugerencia valida para el IFT.