El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) emitió un comunicado en el que señala una disminución anual de 12.6 por ciento en el Índice de Precios en Comunicaciones, a octubre de este año.
Es una buena noticia para los millones de usuarios que diariamente consumimos uno o varios servicios de telecomunicaciones, sobre todo considerando un crecimiento anual (inflación) del Índice Nacional de Precios al Consumidor del 3.1 por ciento, según datos del Inegi.
La caída en los precios de los servicios móviles fue el principal factor. Éstos se redujeron en 28.5 por ciento, al tiempo que los precios de la telefonía fija, la larga distancia internacional, y el Internet fijo permanecieron estables. La televisión de paga registró un leve incremento en precios del 3.2 por ciento, principalmente debido a la depreciación del tipo de cambio.
Ahora, si bien hay que reconocer que vamos en la dirección correcta, estamos lejos de lograr un entorno en competencia en el sector de las telecomunicaciones. La concentración del mercado no ha variado desde que entró en vigor la reforma constitucional y la nueva Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión.
Tanto en servicios móviles, como fijos, América Móvil, el preponderante, mantiene una concentración del 70 y 80 por ciento del mercado, respectivamente. En el caso de la radiodifusión, el IFT otorgó una concesión para una tercera cadena de TV a Grupo Imagen, que apenas entró al aire. Y está por licitar más frecuencias de radiodifusión, que podrían formar una cuarta cadena nacional, o varias regionales. Sin embargo, Televisa todavía mantiene una posición preponderante en el mercado.
El IFT no puede bajar la guardia de ninguna manera sólo por observar una disminución de precios en el mercado. La regulación asimétrica impuesta a los preponderantes se tiene que revisar, reforzar y/o endurecer, a fin de alcanzar a la brevedad mercados que funcionen en competencia.
No parece ser el momento más propicio para licitar frecuencias de TV, en razón a la depreciación que ha sufrido el peso. Casi toda la infraestructura que se necesita para montar una estación de TV está cotizada en dólares. También subsiste una enorme incertidumbre de lo que vaya a pasar con el gobierno de Trump, y lo que sucederá en México en 2018. Los inversionistas andan cautelosos. Pero bienvenida la licitación.