Roberto García Requena/ Ovaciones
La propuesta del gobierno federal en la miscelánea fiscal para 2014 era cobrar un monto significativo por concepto de derechos por el uso del espectro radioeléctrico en las bandas de 700 MHz y de 2.5 GHz. Los diputados tenían una contrapropuesta para disminuir sensiblemente el cobro por estos derechos en dichas bandas. Finalmente, el pasado viernes que se votó la Ley Federal de Derechos se decidió eliminar los artículos 244-G y 244-H de la iniciativa. Aparentemente, y ese fue uno de los argumentos para su eliminación, se tendrá que, primero, esperar a la legislación secundaria en telecomunicaciones antes de definir la carga fiscal que tendrán estas bandas del espectro.
Esto no quiere decir que eventualmente los concesionarios de estas bandas no tengan que tributar derechos. Simplemente la decisión fue postergar el gravamen que tendrán que pagar hasta en tanto no se conozca la política pública a concretar en este espectro. Hay que recordar que tanto la banda de 700 MHz como la de 2.5 GHz son las dos bandas en las que ya existe la tecnología y que se han identificado alrededor del mundo como las ideales para desplegar servicios de banda ancha móvil. Evidentemente tienen una alta rentabilidad desde un punto de vista de explotación comercial.
Sin embargo, desde hace mucho tiempo he sostenido que establecer un pago de derechos en la ley por el uso de estas bandas –o cualquier otra- no es lo óptimo desde una visión de expansión de infraestructura y servicios. El apetito recaudatorio de las autoridades hacendarias a veces puede llegar a distorsionar el valor de mercado de un bien del dominio público como lo es el espectro radioeléctrico.
Ahora bien, no estoy diciendo que no haya que cobrar por el uso del espectro, sino que hay que cobrar el precio de mercado que permita a los inversionistas lograr un plan de negocios coherente y equilibrado. La mejor manera de lograr lo anterior es no imponer derechos por el uso de las bandas y mejor, en su lugar, llevar a cabo procesos de licitación bien estructurados para el concesionamiento del espectro. La licitación es la única manera de otorgarle el espectro a quien más lo valore desde un punto de vista económico, y también es la única manera de que el Estado reciba el precio de mercado por concesionarlo. Así que, en mi opinión, habría que eliminar por completo el cobro de derechos y utilizar la licitación como método recaudatorio. De hecho, así es en el resto del mundo.
Foro internacional de telecomunicaciones
El Senado de la República está organizando para fines de este mes un encuentro con expertos nacionales e internaciones en materia de telecomunicaciones. Asistirán analistas de la OCDE y de la CEPAL. Esperemos que de ahí salgan buenas ideas para aterrizar la legislación secundaria que está pendiente desde la reforma constitucional.
correo electrónico: garciarequena@yahoo.com.mx
-0-