2021.02.04
Vía El Economista
El #Censo2020 más allá de ser un ejercicio estadístico de conteo poblacional y perfilamiento sociodemográfico, se constituye como un diagnóstico y medición de los avances en la satisfacción de derechos fundamentales como lo es la educación, salud y por supuesto, la conectividad y las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).
En esta ocasión, se provee un panorama de acceso a dispositivos (televisor, celular, radio computadora y consolas de videojuegos) y servicios de conectividad (internet, TV de paga, telefonía fija y servicios de video bajo demanda por internet) previo al ‘empujón digital’ causado por la pandemia, al tener un periodo de levantamiento entre el 2-27 de marzo de 2020, es decir, prácticamente al inicio de esta crisis de salud pública y económica.
Ciertamente, a casi un año de su inicio, se ha acelerado y profundizado la apropiación y aprovechamiento de estos bienes y servicios en nuestro país, especialmente en aquellos hogares y unidades económicas que se encontraban desconectados o escasamente contaban con equipamiento para poder continuar con su labor productiva, social, educativa, lúdica, entre otras, al imponerse el confinamiento y el cese en la apertura de empresas y negocios.
No obstante, aún es menester alcanzar un pleno acceso y uso de la conectividad para toda la población y territorio nacional, en línea con el mandato constitucional establecido en el artículo 6º, tal como lo indican los resultados del #Censo2020 en materia de TIC.
Adopción de Dispositivos de Conectividad. De acuerdo con el INEGI, el televisor es el dispositivo con mayor disponibilidad en las viviendas mexicanas, al alcanzar una razón de 91.1% y ser el principal medio de acceso a una diversidad de contenidos, especialmente a aquellos educativos durante la pandemia.
Asimismo, se reporta que 87.5% de las viviendas disponen de un teléfono celular. Para 38.6% de estas incluso es la única vía para la transmisión de comunicaciones de voz y datos, tal que no cuentan con otro servicio de conectividad (telefonía fija y/o internet).
Por su parte, una proporción de 37.6% cuentan con una computadora personal (escritorio o laptop) y/o una tableta, dispositivos que han sido esenciales durante la pandemia y que han registrado agotamientos de stock en principales puntos de venta, tanto físicos como digitales.
Acceso a Servicios de Conectividad. 52.1% de las viviendas del país dispone de una conexión a internet, servicio que registra una rampa ascendente hacia su plena democratización y que se posiciona en segundo lugar por su nivel de adopción, tras la comunicación celular (87.5% del total). Mientras que la telefonía fija alcanza a una razón de 37.5% entre el total de viviendas.
Si bien en años recientes, se ha intensificado la competencia en el mercado de contenidos audiovisuales, a partir de la incursión y diversificación de plataformas de streaming, la TV de paga más que duplica su presencia en las viviendas mexicanas (43.3% del total) frente a estas últimas (18.8% del total).
De hecho, tan sólo una razón de 5.3% de las viviendas podrían haber encontrado en las plataformas de video bajo demanda por internet (SVOD por sus siglas en inglés) un sustituto para acceder una diversidad de contenidos locales e internacionales.
La información reportada por el INEGI constituye un punto de partida para dimensionar los impactos que ha tenido la pandemia sobre el acceso y aprovechamiento de la conectividad en los hogares de México. Asimismo, provee un diagnóstico para la definición de esfuerzos y estrategias en torno a la promoción de inversiones, dotación de infraestructura y educación digital para alcanzar un escenario de plena adopción de las TIC en nuestro país.
