Adrián Arias | La Crónica de Hoy | 26 de Octubre 2015
—¿En qué estatus se encuentran las televisoras públicas y cuánto presupuesto necesitan para la digitalización?
—Del total de nuestros asociados, 39 son televisoras, de las cuales 29 estaciones son las que necesitan recursos. Ya se han hecho algunas inversiones previas en el equipo tecnológico, pero todavía no estamos preparados para el apagón. Calculamos que son alrededor de mil 500 a 2 mil millones de pesos lo que nos costaría la digitalización.
En estos 29 medios tenemos alrededor de 400 estaciones repetidoras, que es lo mismo que transmisores, entonces el costo de esos transmisores es elevado y tenemos que cambiar toda la producción desde las entrañas de las televisoras, como las cámaras de estudio, los aparatos, el cableado, servidores más potentes que aguanten la señal digital o de alta definición y todo eso representa un elevado costo.
Los gobiernos estatales han hecho un esfuerzo importante para liberar recursos, pero no ha sido suficiente para garantizar que nuestra señal llegue con calidad y tampoco vamos a lograr la cobertura que tenemos en estos momentos en calidad análoga, si se realiza el apagón en estos momentos.
El espíritu de la reforma de telecomunicaciones es brindar calidad de contenidos de televisión y diversidad, en beneficio de las audiencias. En contenidos de calidad, los medios públicos a eso nos dedicamos, a difundir la cultura. Algunos de nuestros asociados transmiten programación en lenguas indígenas, programas de derechos humanos, de salud, de prevención de desastres, cuestiones de protección civil. Es decir, tenemos una función social y nosotros no competimos por el rating, no somos competencia para los medios comerciales.
Nuestra preocupación es dejar sin señal a las audiencias, porque no vamos a tener gran cobertura ni una señal de calidad como obliga la ley.
—¿Cuál es la cobertura de la Red México?
—No tenemos como tal una medición de quiénes nos ven, sino nuestra audiencia potencial. Es decir, la población que podría vernos. De acuerdo con la cobertura estimada de estas 29 televisoras, tenemos una cobertura potencial del 70 por ciento de la población nacional. Hablamos de poco más de 70 millones de habitantes, aclaro que es población que nos puede ver, no que necesariamente nos esté sintonizando.
Nosotros somos los medios que tenemos más transmisores diseminados en territorio nacional, porque como nuestra misión es social, nosotros tenemos que avisarle, por ejemplo, a las personas que están en la costa, que se acerca un huracán y alertarlos sobre los riesgos. Entonces este compromiso nos ha llevado a crecer nuestra cobertura, porque tenemos que llegar a las grandes poblaciones pero también a las zonas alejadas, donde está la gente más desvaforecida.
—¿Cuál sería el impacto para la población si se realiza el apagón mientras los medios públicos no están preparados?
—Hay sistemas que tienen dos transmisores principales cuya señal es muy amplia pero tienen otras antenas complementarias para contar con más cobertura. Entonces, hay casos de estaciones que tienen dos antenas principales y 30 complementarias, y esas antenas también se tienen que migrar a tecnología digital. Tomando en cuenta estos datos, dejaríamos sin señal a un 30 ó 40 por ciento de la población.
Otra de nuestras preocupaciones es que con el apagón no vamos a recuperar la cobertura que tenemos ahora en análogo. Chiapas por ejemplo tiene 10 transmisores principales y 69 complementarios, bañamos el 80 por ciento del territorio estatal y las privadas apenas cubren el 35 por ciento de esa localidad, porque no les interesa llegar a los pueblitos, sino llegar a las grandes ciudades que son negocio, lo que es una cuestión legítima.
—¿Qué piden ustedes al Congreso de la Unión, además de los recursos?
—Pedimos aplazar el apagón un año, porque no solo se trata de instalar la tecnología para transmitir en señal digital, sino transformar toda nuestra producción al nuevo formato. Si no se aplaza, estaríamos en desventaja frente a las televisoras privadas.
De las 39 televisoras de la Red, hay solo 10 medios digitalizados que son Canal 22, Canal 11, el Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR), el Canal Judicial, Capital 21, la televisora de la Universidad de Guadalajara, de Nuevo León, entre otros. El resto ha enfrentado problemas para digitalizarse, por ejemplo el Sistema de Radio y Televisión Mexiquense, que en el DF se sintoniza en el canal 34, lleva un avance importante en digitalización, pero ellos empezaron a invertir desde hace 8 años.
Podemos migrar a la digitalización, pero no podemos garantizar la cobertura, y eso va en detrimento de los derechos de las audiencias y del espíritu mismo de la reforma de telecomunicaciones, de mantener la continuidad del servicio de televisión radiodifundida.
No sería justo que, las empresas privadas que han invertido porque tienen recursos, se verán en calidad digital y cuando las audiencias nos sintonicen a nosotros, no nos puedan ver o tengan problemas para captar nuestra señal. Un transmisor nos cuesta hasta 3 millones de dólares y estamos sujetos a la paridad del dólar, si el dólar sube a nosotros nos cuesta más, es un tema muy complejo.
