Con el folio único T1-005324, la empresa Tecnoradio fue no sólo el postor que se hizo del mayor número de frecuencias de radio, con un total de 37, sino también el que presentó la mayor propuesta en valor con 287.8 millones de pesos, monto que superó la apuesta de Grupo Radio Centro (GRC) de 250 millones 229 mil pesos por las 5 frecuencias que se adjudicó.
El reporte final de la presentación de ofertas de ambas frecuencias revela que Tecnoradio pujó por 34 frecuencias en FM y 3 en AM, con las ofertas más altas. Para FM la firma, de la que no hay información en la red ni existe registro de alguna otra licitación pública en que haya participado, ofreció un total de 268 millones 24 mil pesos, mientras que para las de AM lo hizo con 19 millones 764 mil pesos.
Las estaciones AM a las que se hizo acreedora Tecnoradio se ubican en Querétaro, Guanajuato, Cuernavaca y Morelos.
En tanto, las de FM están en localidades de Aguascalientes, Campeche, Chihuahua, Chiapas, Guerrero, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Sinaloa, Veracruz y Zacatecas.
La firma registrada como Centrado Corporativo fue la segunda en la lista con mayor número de adjudicaciones, al llevarse ocho frecuencias en FM; seguida de Empresa Turquesa con seis, al igual que TV ZAC; así como Pantalla Líquida y Promotora de Éxitos, el participante con el que GRC pujó en la subasta pública.
En AM, el participante Escápate al Paraíso licitó por 14 frecuencias, mientras que Media FM apostó por cinco en la contienda.
La oferta por las 147 frecuencias en FM fue de 951 millones de pesos, mientras que de las 31 frecuencias en AM el monto rondó los 133 millones de pesos, lo que da un total de mil 84 millones de pesos.
CRITICAN SUBASTA
Pese al interés mostrado por la licitación de estaciones de radio de uso comercial, la Asociación Mexicana de Derecho a la Información señaló que la nueva configuración de estaciones de radio no refleja mayor pluralidad y diversidad en el cuadrante, además de que tampoco observa avances en promover la radiodifusión pública, comunitaria e indígena.
“La recaudación fue resultado de un proceso competido por ganar las frecuencias y las localidades más atractivas, pero también refleja que el precio mínimo de referencia establecido por el IFT fue muy bajo, lo que desmiente la postura inicial de la CIRT cuando propagaba que la licitación causaría un impacto ‘irreversible’ y ‘hostigaba’ a la industria”, señaló el organismo.