2018-12-26
Actualmente el número de fuentes de entrenamiento, capacitación y certificación en línea y en persona es realmente amplio; nunca en la historia de la humanidad, ha existido tal cantidad de recursos y sobre todo de impulso a la educación como ahora. Gobiernos, organizaciones y empresas en todo el mundo reconocen que la capacitación es clave para alcanzar 3 factores determinantes en una inevitable transformación digital del mundo que conocemos. Relevancia, productividad y rentabilidad.
La habilidades que nos permiten alcanzar y mantener estas 3 características que el mercado laboral y los estándares de competitividad exigen hoy, se remiten a una serie de hechos alrededor de la única constante en un mundo de variables: las tecnologías de la información. Si lees esto y eres abogado, vendedor o comerciante, es probable que pienses “esto no tiene que ver conmigo…”, y es ahí donde te equivocas, las tecnologías de la información no es una actividad aislada de las demás actividades productivas o servicios reservados para expertos; las tecnologías de la información y comunicación (TICS), es la forma que está tomando el mundo a través de la creatividad aplicada.
Naturalmente esta publicación está enfocada a los profesionales de la comunicación, publicidad, marketing, redacción, relación con medios y todos aquellos en este campo, pero también a quien desee ser en los siguientes 10 años, un profesional funcional en su campo y no uno irrelevante y poco rentable.
De acuerdo con datos publicados por Google, para el año 2020, un tercio de los trabajos demandará a los trabajadores contar con habilidades que no se encuentran comúnmente en la fuerza laboral de hoy. Como muchas otras empresas en colaboración con gobiernos y ONG, Google ha diseñado programas para financiar a organizaciones que utilizan tecnología e innovación para capacitar a personas con nuevas habilidades, conectar a personas que buscan trabajo con empleos de alta calidad y apoyar a los trabajadores con empleos de bajos salarios. Vuelven relevantes a los individuos que se están rezagando.
Esta empresa tecnológica con sede en California, EEUU, ha destinado sólo en 2018 más de 50 millones de dólares para ayudar a las personas para enfrentar la inevitable naturaleza cambiante de sus trabajos alrededor de las TICS, no es repelerlas o evitarlas, sino abrazarlas para hacerlas parte de nuestra profesión, trabajo u oficio.
Goodwill®, la organización desarrollo de fuerza laboral en los Estados Unidos, hace uso de una de las donaciones de la empresa por 10 millones de dólares más 1,000 voluntarios de la empresa, para el lanzamiento de Goodwill Digital Career AcceleratorSM, iniciativa que facilitará a 1,2 millones de personas sólo en los Estados Unidos a ampliar sus habilidades digitales para acceder a mejorar oportunidades laborales con visión a largo plazo y de acuerdo a los requerimientos de empleadores de todo tipo.*1
Datos publicados por el Brookings Institute, indican que la digitalización de nuestro entorno con sus efectos en el mercado laboral, será como la llegada de la electricidad, cubrirá todo con tal amplitud que reorientará por completo toda la economía y nuestro estilo de vida. La institución estima que sólo en los 18 años del siglo XXI, la cantidad de empleos en los EEUU que requieren altos niveles de habilidades digitales ya se ha cuadruplicado, de un 5% a un 23% del empleo total, aproximadamente treinta y dos millones de empleos. Los empleos que demandan pocas habilidades digitales ha caído del 56 por ciento a menos del 30 por ciento.*2
La historia económica sugiere que los avances tecnológicos impulsan nuevas formas de trabajo. Un ejemplo es la del desarrollador web, puesto que no existió formalmente hasta principios de 1990, siendo el año pasado quien empleó a más de 150 mil estadounidenses con un salario promedio de USD $66,000 con sofisticadas habilidades de reparación. Con una mayor adopción de tecnologías como los autos autónomos y eléctricos, las tecnologías emergentes requerirán mantenimiento y reparación por parte de los seres humanos, lo que creará nuevos trabajos tecnológicos para aquellos con habilidades sofisticadas de reparación.
La tecnología no sólo nos hará relevantes, sino mucho más productivos en esquemas laborales flexibles y rentables al medir con mucha más precisión que lo que producimos, tiene un impacto medible en el ecosistema en donde nos desarrollemos. Sin importar a qué nos dediquemos, abrazar a las tecnologías de la información es clave para nuestra supervivencia laboral pero sobre todo para impulsar a nuestras economías para ser mucho más competitivas.