Especialistas te dan algunos consejos de lo que puedes hacer si eres uno de los 16 millones de mexicanos que se quedaron sin una televisión digital y no están listos aún para el ‘apagón analógico’ que se realizará el próximo 31 de diciembre.
Cuatro millones de hogares en los que habitan 16 millones de mexicanos se quedarán ‘apagados’ después del 31 de diciembre de 2015, cuando por ley se deben terminar las transmisiones analógicas y se inicie las transmisión de la Televisión Digital Terrestre (TDT).
De acuerdo con especialistas, para el bolsillo más apretado, la solución inmediata es la adquisición de un decodificador para convertir la señal digital y aprovechar el aparato analógico.
“Se hablaba de que se iban a repartir 13.8 millones de televisores y la SCT entregará 9.4 millones, por lo que estaríamos hablando de una diferencia de alrededor de 4 millones de hogares, multiplicados por 4 personas, que es el promedio de habitantes que tiene cada hogar, hay una afectación de 16 millones de personas a las que originalmente se les iba a otorgar una pantalla”, explicó Marcos Manrique, académico de la UNAM y el CIDE.
Los precios en tiendas de electrónica y departamentales de decodificadores van de 400, a mil 200 pesos. Es un monto único de inversión, mientras que si se opta por un paquete básico de televisión de paga requeriría una inversión anual mínima de mil 548 pesos para Dish, o de 2 mil 28 pesos en el caso de VeTV, de Sky.
Jesús Romo, analista de Telconomía, consideró que se debe analizar la situación financiera en el hogar para seguir recibiendo señal televisiva abierta, ya sea con la compra de un decodificador o la contratación de un servicio de paga.
“Si no se puede hacer una inversión radical, hay que aprovechar que los televisores pueden durar más, contaminar menos y seguir siendo útiles con un decodificador, en ese tiempo el consumidor puede tener un plan para adquirir una televisión digital”, dijo.
De acuerdo con Manrique, es preferible la adquisición de un televisor digital bajo un esquema de financiamiento a meses sin intereses. De esta manera, un televisor de 32 pulgadas requeriría un desembolso de entre 300 y 500 pesos al mes.
“Pensar en soluciones a largo plazo es más conveniente, y más que pensar en adquirir un decodificador, pensar en un ahorro o esquemas de crédito para la adquisición de una pantalla”, dijo Manrique.
El precio de una pantalla de 24 pulgadas, como las que entrega la SCT, va de 3 mil 200, a 5 mil pesos, mientras que las de 32 pulgadas van de 3 mil 900, a 6 mil 500 en promedio, aunque pueden existir opciones más económicas.
Al 13 de septiembre, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes había entregado 5.3 millones de televisores y según la dependencia, la entrega de equipos se hace en el orden de 70 mil diarios.