Tecnoradio, empresa que ganó 37 estaciones, proporcionó la información relativa a su actual estructura accionaria y entre sus socios no figura Carlos Lara Sumano, director general del IMER.
La participación de Tecnoradio en la reciente licitación de estaciones de radio fue analizada y autorizada conforme a la ley; además de que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) verificó que Carlos Lara, director del IMER, no es accionista de dicho consorcio.
El regulador explicó en un comunicado que Tecnoradio, empresa que ganó 37 estaciones de radio, proporcionó la información relativa a su actual estructura accionaria y de sus socios, entre los cuales no figuran Carlos Lara Sumano, director general del Instituto Mexicano de la Radio (IMER), ni Cenobio Alfonso Amilpas Godínez, quien laboró en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
Tecnoradio se ha visto envuelta en polémica debido a la alta cantidad que ofreció por las frecuencias de radio, 288 millones de pesos, además de que hasta antes de dicho comunicado, el Ifetel no había informado sobre la estructura accionaria de la empresa, debido a que las bases de la licitación señalan que esa información se podrá publicar hasta que termine el concurso, luego de que las empresas paguen por las frecuencias y el regulador entregue las concesiones.
Lara Sumano ha aclarado que fundó Tecnoradio pero que la empresa nunca operó y que ya no cuenta con acciones de la compañía, la cual se vendió en 2016. El Ifetel no reveló quiénes son los accionistas que sí acreditaron la propiedad de la empresa para entrar a la subasta.
Actores de la industria denunciaron que la participación de Lara en la licitación podría implicar un conflicto de interés, pero el Ifetel desvirtuó esas suposiciones al confirmar que no está relacionado con Tecnoradio.
El regulador aclaró que las operaciones previas a la licitación sobre las acciones representativas del capital social de las empresas participantes son responsabilidad exclusiva de quienes las hayan realizado. El objeto de análisis del Ifetel se centró en los accionistas de las empresas al momento de registrarse en la licitación y no en quienes lo hubieran sido en el pasado, lo que es consistente con precedentes licitatorios de este Instituto.