La empresa seguirá perteneciendo a accionistas de América Móvil, pero su consejo de administración estará integrado por representantes de otras compañías de telecomunicaciones.
La separación funcional de Telmex continúa a pesar de que fue admitido el amparo de la empresa contra esa medida, debido a que no es posible suspender las resoluciones del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) durante el litigio, de acuerdo con el Juzgado Segundo Especializado en Telecomunicaciones.
El Ifetel ordenó a Telmex crear una nueva empresa que opere de manera independiente y que se encargue de rentar infraestructura a otros competidores. Si bien la empresa seguirá perteneciendo a los accionistas de América Móvil, contará con reglas de operación que buscan garantizar su independencia; por ejemplo, su consejo de administración estará integrado por representantes de otras compañías de telecomunicaciones.
Telmex interpuso un amparo que fue admitido bajo el expediente 191/2018, en donde el juzgado señaló que no se tramitará el incidente de suspensión de los actos reclamados, es decir, que la resolución en donde se ordena la separación funcional no será suspendida y continuará su marcha.
La telefónica ha señalado que sus propuestas no fueron tomadas en cuenta por el Ifetel para el plan de separación funcional; además aseveró que no subsidiará ni financiará las operaciones de la empresa que se separará.
La operación deberá concretarse en un periodo de dos años y los resultados que la separación genere en el sector serán cruciales para que la telefónica pueda ofrecer el servicio de televisión de paga.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha recomendado al Ifetel evaluar la entrada de América Móvil en el mercado de TV restringida lo antes posible, después de la implementación exitosa de su separación funcional, con lo cual añadiría competencia en ese mercado.
De acuerdo con el “Estudio sobre telecomunicaciones y radiodifusión en México 2017”, el organismo internacional señala que este cambio evitaría que América Móvil aproveche el poder de mercado con el que cuenta para dificultar el acceso a su infraestructura hacia otras empresas, y al mismo tiempo le permitiría competir con sus rivales al ofrecer un paquete completo de servicios, incluyendo la TV restringida.