Lo bueno… La revolución tecnológica abrió la puerta a un universo nuevo de servicios financieros. Actualmente, en el mundo existen más de 5 mil empresas fintech, dedicadas a ofrecer soluciones en materia de seguros, inversiones y préstamos.
En México, el fenómeno también pisa fuerte. Se calcula que por lo menos unas 500 empresas de este tipo han llevado a cabo operaciones aquí. Asimismo, a julio del 2015 unos 4 mil 081 proyectos se fondearon mediante estas plataformas tecnológicas, lo que significó la friolera de 256 millones de pesos.
En este sentido, desde el pasado mes de marzo la SHCP de José Antonio Meade, Banxico de Agustín Carstens y CNBV de Jaime González Aguadé entregaron el proyecto de Ley de Tecnología Financiera al Congreso para su aprobación. Al detalle el documento establece un innovador andamiaje que se sustenta en 5 pilares.
Por un lado busca profundizar la inclusión financiera, a la vez que fomenta la competencia mediante mecanismos de regulación asimétrica en materia de gobierno corporativo, requerimientos de capital y comités de auditoría. Lo anterior a fin de evitar que las empresas más pequeñas se vean asfixiadas por una sobrerregulación.
De igual forma apunta una serie de obligaciones para las fintech en cuestión de revelación de riesgos de inversión, para la protección al consumidor y reporteo a favor de la estabilidad financiera.
Amén de que sujeta a estas empresas a mantener los mismos lineamientos en materia de prevención de lavado de dinero, que el resto del sistema financiero, lo que acota su utilización por parte del crimen organizado…
Lo malo… Aunado a lo anterior, el proyecto de ley establece la creación de dos figuras adicionales, que son las Instituciones de Fondos de Pago Electrónico y las Instituciones de Financiamiento Colectivo, las cuales tendrán algunas particularidades.
Estas entidades, una vez aprobadas, podrán captar y segregar activos de clientes ahorradores para proyectos específicos, lo cual constituye una concesión al artículo 103 de la Ley de Instituciones de Crédito.
Asimismo, se busca modificar la Ley General de Títulos de Operaciones de Crédito, para el reconocimiento de la firma electrónica en operaciones mercantiles.
Y se establece una excepción especial a las normas del mercado de valores, para el anuncio de ofertas públicas, a fin de facilitar la salida de proyectos mediante el financiamiento colectivo, también conocido como crowdfunding.
Sin embargo, Federico de Noriega, socio del despacho especializado Hogan Lovells, hace ver que si bien la nueva normativa es un buen primer paso, lo malo es que todos los detalles, en torno a requisitos de aprobación, reporteo y requerimientos de capital, se remiten a la regulación secundaria. Así que aún impera la incertidumbre…
Lo feo… Por si fuera poco, la propuesta deja fuera todo lo referente a las obligaciones fiscales, retención de impuestos, pagos de IVA por parte de los prestatarios y retención de ISR. En otras palabras, persiste un tremendo boquete regulatorio…
Hoy, Foro Nacional IMEF de Infraestructura
Hoy… el IMEF, que comanda Adriana Berrocal, llevará a cabo su 9º Foro Nacional de Infraestructura.
Al ilustre encuentro se darán cita Alonso Díaz Etienne, presidente de la AMEXCAP, Felipe Bracamontes de AMANAC, Jaime de la Rosa Montes de la Asociación Mexicana de Energía y Lorena Patterson de la Asociación Mexicana de Gas Natural. Panel todo terreno…