El grupo que reúne a los reguladores nacionales europeos aprobó un reglamento sobre la neutralidad de la red en Europa. Un documento con el que pretende evitar que los proveedores del servicio bloqueen o filtren, según sus intereses, el tráfico generado por productoras de contenidos como Facebook, Spotify, Google etc, según consignó el diario español El País.
Desde octubre de 2015 la comunidad europea está sumida en un debate sobre el acceso a Internet, y el principio de neutralidad, según el cual, los contenidos en la red deben ser accesibles a todos sin priorizar unos sobre otros.
A pesar de que en las nuevas regulaciones se mantiene el principio de neutralidad existen lagunas legales que pudieran propiciar que algunos proveedores de servicios de banda ancha modifiquen el tráfico de datos según sus intereses.
Las compañías podrán ralentizar o agilizar la descarga de aplicaciones, documentos o servicios según términos acuñados en la normativa como: servicios especiales, zero rating, discriminación por clase y prevención de la congestión de tráfico. Dichas conceptos dejan lagunas que según organizaciones en pro de la libre circulación de datos en la red atentan contra la libertad de elección del consumidor, fomentan prácticas monopólicas y alimentan la censura. El texto redactado no aclara cuáles son los criterios para definir “servicios especiales”. Con este eufemismo los proveedores de Internet podrán crear dos vías de transmisión de datos: una rápida y otra lenta.
El problema es que no se define cuáles son estos servicios ni se especifica que no deben ser de carácter económico, con lo cual, una gran empresa podría pagar por ir por la vía rápida, mientras que las startups, empresas pequeñas que parten desde cero creciendo con el potencial de Internet, dejarán de tener las oportunidades que tienen hoy en día, se quedarían en la vía lenta junto con todos los servicios que no puedan pagar. Además, esta laguna también podría permitir a las operadoras crear paquetes de servicios a su antojo, beneficiando o perjudicando a determinados contenidos.
Activistas que participaron en Save The Internet, compañías internacionales como WordPress, Netflix, Reddit, Tumblr, Vimeo o Kickstarter, y personalidades como Tim Berners Lee (creador de la World Wide Web), habían luchado porque se incluyesen una serie de enmiendas que fueron rechazadas.