Se han cumplido dos años desde la implementación de la Reforma de Telecomunicaciones en México y sorprenden los resultados del “The Global Information Technology Report” de la Universidad de Cornell e INSEAD presentado durante el World Economic Forum.
El reporte de 2016 se enfoca en la regulación y la eficiencia legal en materia de telecomunicaciones como indicadores que han obstaculizado el desarrollo social y económico de México, además de su impacto en las economías digitales. A través del Networked Readiness Index (NRI) contempla a 139 países que a través de 53 indicadores en las áreas de desarrollo de las tecnologías de información y comunicación hace un análisis para hacer algunas recomendaciones. El reporte resalta la importancia de Internet como uno de los conductos de progreso social más importantes, por lo que hace un llamado a las economías mundiales a trabajar en políticas de inversión que mejoren las tecnologías de la información.
Su objetivo es evidenciar la disruptiva que causa el Internet en los sistemas de producción, el manejo y la gobernanza a través de la era digital. Lo anterior hace un exhorto a las autoridades mexicanas como el Instituto Federal de Telecomunicaciones, que dirige Gabriel Contreras y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes que conduce Gerardo Ruiz Esparza a materializar la reforma en telecomunicaciones en beneficios en otros sectores productivos y económicos como son la educación, salud, energético, seguridad entre muchos otros.
El reporte da a conocer que entre los años del 2014 y 2015 México ha demostrado un deterioro en los impactos sociales en telecomunicaciones debido a la regulación y la legalidad en el sistema. Esto hace un llamado a nuestras autoridades a manejar sus decisiones de manera más transparentes pese a las campañas de éxito en la materia.
El reporte también destaca la importancia de llevar los instrumentos de las tecnologías de manera eficiente para prevenir el incremento de las amenazas de ciber ataques, problemas de privacidad y los efectos que polarizan los mercados laborales dado que a pesar de los esfuerzos de la reforma en telecomunicaciones el avance en estas materias es débil.
Por último, es importante señalar que el IFT debería de tener mayor determinación en la toma de decisiones transparentes y con ello poder contribuir en un campo parejo en materia jurídica para los diferentes actores del sector y que contribuya a un desarrollo en materia de políticas públicas acorde a la realidad internacional.