Julio Brito | La Crónica de Hoy | 10 de Noviembre 2015
La competencia en el sector de telecomunicaciones empieza a surtir efecto a casi dos años de la reforma. La llegada de AT&T dio un giro a las comunicaciones entre México y Estados Unidos. Hoy vemos planes accesibles, que en otros tiempos resultaban un asalto a miles de hombres de negocios y turismo.
También debe destacarse el papel que está jugando Izzi desde que llegó al mercado hace aproximadamente un año. La clave del éxito fue que se comprendió que había que “paquetear” lo que se llama el triple-play, que es telefonía, video e internet, de tal forma que se hicieron muy accesibles a la población en general. La respuesta por parte de Infinitum, de Telmex no se hizo esperar y al final el ganador fue el consumidor, donde se abrieron una serie de opciones, en las que sé incluye Total-Play.
Los resultados anuales de Izzi permite ver los avances de la competencia, de tal manera que de julio a septiembre de este año sus ingresos se incrementaron 14 por ciento para llegar a 2,864 millones de pesos, es decir, un aumento del 21 % comparada con el año anterior. Los suscriptores únicos aumentaron 15 por ciento a un millón 176 mil usuarios.
El triple play, por su naturaleza de ser varios servicios a la vez, se ve fortalecido por su economía de escalas y de empaquetamiento de al menos el 40 por ciento en banda ancha y línea fija respecto a telefonía.
Pero además el mercado se empieza a segmentar. Ya no se hacen disparos al alza. En busca de un segundo empuje Izzi entra el mercado de la Pequeña y mediana industria. Está ofreciendo internet de banda ancha, llamadas ilimitadas a teléfonos fijos en México, Estados Unidos y Canadá, minutos ilimitados a celulares en Estados Unidos y Canadá, además de 300 minutos a celulares y dos líneas telefónicas por 500 pesos al mes.
La idea es ir a un mercado entre 5 y 6 millones de clientes, que hasta el momento estaban mal atendidos.
FRAUDES. En una estrategia desesperada Eurisaces Ibarra Mercado de Grupo Comercializador Productivo enfocado en el sector minero en Sonora, intenta frenar las demandas en su contra ofreciendo como pago de sus deudas con instituciones financieras y proveedores, terrenos mineros y activos que no son de su propiedad. En su desesperación por rescatar lo que se pueda, varios acreedores, entre los que se encuentran políticos, abogados y empresarios aceptan los documentos apócrifos y promesas sin sustento. También hay un grupo entre los defraudados de campesinos y ejidtarios, ya que ha pagado a algunos líderes ejidales para que muevan a la comunidad. Obvio, las demandas están a la luz del día, por lo que es factible que de un momento a otro la mano de las autoridades judiciales lo alcancen y junto con él Guillermo Padrés, ex gobernador de Sonora y Carlos Navarro, ex procurador general de dicho estado, a quienes ya se investiga por dejar pasar una serie de irregularidades de Grupo Comercializador Productivo