2022.03.01
Vía El Economista
Adolfo Cuevas Teja, abogado de profesión y con especialidad en materia de telecomunicaciones y radiodifusión, concluye nueve años de trabajo como comisionado en el regulador IFT, dos de ellos como presidente interino y un contexto en que el gobierno federal y la Cámara de Senadores no han elegido nuevo presidente de ese organismo y ni los dos miembros que ocupen las dos vacantes del pleno de IFT que existen desde el 2020.
Adolfo Cuevas Teja dice adiós al Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) con el último minuto del lunes 28 de febrero, y ante la indefinición de la Presidencia de la República y del Senado por colaborar en la elección de un nuevo presidente para ese órgano autónomo, el comisionado Javier Juárez Mojica será por estatutos internos el nuevo jefe del IFT desde el martes 1 de marzo y hasta el octubre del año 2025, en tanto esos poderes no dispongan en el tiempo de un nuevo comisionado presidente.
Desde la óptica más nítida, Adolfo Cuevas Teja fue el tercer presidente del IFT después de dos gobiernos de Gabriel Contreras y del interinato de Adriana Labardini. La suya, un interinato también, es la cuarta presidencia que ha dirigido al Instituto Federal de Telecomunicaciones en sus ochos años de vida.
Cuevas Teja, relacionado siempre con la industria de la radiodifusión y las telecomunicaciones desde 1992 por su paso en distintas áreas del Imer y la extinta Cofetel, tuvo una calificación casi perfecta en el examen de selección para convertirse en comisionado del nuevo regulador sectorial e integrar desde el 2013 con Labardini y Contreras la parte del IFT que hasta ahora había venido analizando la legalidad y el derecho de todo lo que esa autoridad resolvió.
Todos los presidentes del IFT han sido abogados hasta hoy y Juárez Mojica será el primer ingeniero presidente de este regulador técnico, así su gobierno dure una hora o los tres años que aún le restan de su trabajo como comisionado.
La herencia de Adolfo Cuevas Teja
La presidencia de Adolfo Cuevas se caracterizó por andar en medio de la pandemia de coronavirus y por una colaboración muy fuerte con la industria, pero que sí tardó en reaccionar, cuando otros reguladores de Latinoamérica advirtieron pronto lo que significaban los impactos de la Covid-19 a las economías y la importancia extrema que tomaron las telecomunicaciones en el confinamiento sanitario.
Bajo su presidencia, en lo que toca al trabajo puro del IFT, se determinaron asuntos como la política mexicana en Neutralidad de la Red; el señalamiento de Televisa y Megacable como agentes con poder sustancial de mercado en televisión de paga; la libertad tarifaria para Telmex y Telnor; la concesión de video restringido para Claro TV que quedó en el aire; la continuación en los procesos de operación de las mayoristas Red Nacional Última Milla y Red Última Milla del Noroeste; el concurso mercantil de Altán Redes; la pelea de las empresas de Internet contra las operadoras de red por la banda de los 6GHz; la venta de Maxcom; la todavía en marcha licitación de radio AM/FM y la malograda subasta de bandas para mejorar coberturas 4G-LTE; las maniobras de Movistar por usar red de última generación sin espectro propio y las de América Móvil por quedarse con los espectros de 3.5 GHz de Axtel. También ocurrió el escandaloso Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (Panaut).
Los primeros encendidos de red 5G de AT&T y Telcel entre 2021 y 2022, son parte de su herencia también.
Rebeldía en el IFT contra Cuevas
En la necesaria comunicación del IFT con los poderes de la Federación, la presidencia que fenece quedó marcada por la escandalosa historia de que la propuesta para fusionar al IFT con la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) en un mismo órgano al estilo español, salió de la oficina de un colaborador de Adolfo Cuevas.
Este hecho provocó desconfianza del resto de comisionados hacia el presidente interino y éste enfrentó el 2 de octubre del 2020 la rebeldía de ellos en cuanto la elección de funcionarios internos.
Al último, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dio la razón a Cuevas, pero desde entonces el resto del Pleno de comisionados del IFT quedó insatisfecho con su gobierno, sobre todo porque el presidente Cuevas nunca les transparentó sus pláticas en el Senado sobre la fusión de todos los órganos reguladores en uno mismo, según acusaron en su momento los otros comisionados.
El otro escándalo fue el sonado caso de acoso sexual al interior del IFT en el que la afectada terminó siendo despedida y luego reinstalada. Y todo ese ambiente se tensó todavía más con el constante mensaje presidencial de que la 4T persiste en desaparecer a los órganos autónomos, empezando por el IFT.
Cuevas, un comisionado polémico
Los detractores de Adolfo Cuevas Teja estiman que este presidente no logró consolidar el sentido de existencia del Instituto Federal de Telecomunicaciones y por el contrario, se marcha dejándolo debilitado. Sus votos, manifestaron diversos actores de la industria, fueron muy erráticos, con parecido acento a favor de la 4T y como comisionado no gustaba de asistir a las reuniones en el edificio del IFT. Tampoco se explica cómo en su gobierno faltó por hacer más trabajo en la verificación al cumplimiento de las obligaciones de los agentes económicos preponderantes en telecomunicaciones y radiodifusión, y que al inicio de su gobierno tuvo demasiada cercanía con el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana.
A oposición de esas versiones, Adolfo Cuevas Teja estuvo muy presente en foros con agentes regulados y autoridades de distinto nivel y organizaciones civiles, siempre muy abierto a acompañar en orientaciones sobre trámites y explicar el trabajo regulatorio del IFT. Se le recuerda así en todos aquellos foros de transformación digital y con empresas de alta tecnología.
Debe recordarse que en su argumentación para convertirse en presidente del IFT en 2017, fue el primero y más extendido candidato en hablar sobre una potencial y necesaria regulación de las plataformas digitales, cuando ni en Estados Unidos se planteaba todavía la posible partición de Facebook.
Es legendaria su declaración de entonces: “Que me perdonen Facebook, Google, Netflix… quien sea. Si hay algo que dañe potencialmente a este país, debemos intervenir”, dijo Cuevas Teja aquella vez ante los senadores, pero éstos no lo escucharon, porque el entendimiento y visión de ellos se quedó en la tecnología 2G.
Para los periodistas que dan seguimiento a los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión en México, el comisionando presidente saliente del IFT concedió pocas entrevistas y cuando las aceptó, sólo se ajustaba a la estricta agenda de preguntas previamente acordada y es notorio que tuvo predilección por usar de canal de comunicación al programa radiofónico “Fórmula Financiera”, porque su voz se volvió cotidiana allí. Este medio realizó una última petición de entrevista con el comisionado Adolfo Cuevas Tejas, a través de la oficina de prensa del Instituto Federal de Telecomunicaciones. Hasta la publicación de este texto no se obtuvo ningún tipo de respuesta.
La trascendencia de sus participaciones en el IFT
Adolfo Cuevas se licenció en derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México, donde se hizo con una especialidad en derecho constitucional y administrativo. Cuenta además con una maestría en administración pública otorgada por la Escuela de Gobierno John F. Kennedy de la Universidad de Harvard.
El 10 de septiembre de 2013, fue ratificado por el Senado de la República como comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones, cargo que expira en el último día de febrero del año 2022 y desde entonces participó de dos centenares de sesiones ordinarias y extraordinarias del pleno de comisionados en las que se votaron temas tan trascendentes para el mejoramiento de la conectividad de los mexicanos por muchos años y asuntos que impactaron y seguirán impactando a distintas empresas por muchos años más.
En todo ese tiempo se resolvieron los asuntos de las nuevas cadenas de televisión abierta, de la creación de nuevos canales regionales de radio y televisión; diversos procesos de licitación de espectro para telefonía, Internet, servicios satelitales, y se renovaron concesiones hasta por 50 años, entre otros demasiados temas. En el mismo periodo empresas llegaron, se fueron, perecieron y/o cambiaron de manos en México, y a todo ello Adolfo Cuevas participó con su voto:
Febrero 2022, habilitación de la 3.5 GHz para servicios 5G de Telcel. Voto: a favor.
“Es el inicio del despliegue a gran escala de servicios 5G en México, a través de este operador particular y en un espectro mucho más amplio de servicios que ocurrirá en el futuro; sin embargo, es un paso decidido y muy relevante, como nos ha sido comentado por el operador en reuniones de trabajo, en el sentido de una red que podemos llamar verdaderamente de alcance nacional”.
Mayo 2021, controversia contra el Panaut. Voto: a favor.
“Tenemos elementos para considerar que puede haber una afectación a distintas esferas de competencias del Instituto; inicialmente yo referiría el caso del tema presupuestal”.
Agosto 2021, libertad tarifaria para Telmex. Voto: a favor.
“El hecho de que se pueda discutir el día de hoy una medida como esta propuesta, habla del éxito de la reforma de telecomunicaciones en general y del éxito particular de diversas medidas de preponderancia; adicionalmente, son reflejo fiel del éxito logrado por los operadores, por la confianza generada por la reforma, por la confianza generada en la actuación del IFT, que ha llevado a un visible y drástico cambio en las participaciones de mercado en diversas zonas del país”.
Diciembre 2019, controversia contra reducción de salarios a comisionados. Voto: en contra.
“No acompañaré un proyecto de presentación de controversia constitucional por no ver el caso de fondo, dada la nueva realidad del país de una afectación que haga inviable la autonomía del IFT y también por considerar que se requiere más bien un replanteamiento de la relación con el Congreso, que le permita al IFT desarrollar sus funciones de una realidad distinta”.
Febrero 2018, separación funcional en Telmex-Telnor. Voto: en contra.
“En las medidas en que las decisiones ya tomadas tengan una vigencia real e incidan decididamente en el cambio que estamos buscando, eso no es sino reforzar el tipo de decisiones que hoy probablemente podría tomar este Pleno”.
Agosto 2017, fusión Time Warner-AT&T. Voto: diferenciado.
“Yo estoy a favor en general del proyecto (…) Resulta afortunado por lo que hace al mercado de telecomunicaciones móviles, en el sentido de que previsiblemente se ayudará a la expansión de un grupo que ha venido a detonar un importante tono de competencia en México, justificando de esta manera los propósitos manifiestos de la reforma de telecomunicaciones, y me refiero a la presencia de AT&T en México”.
Septiembre 2015, poder sustancial de Televisa en televisión de paga. Voto: a favor.
“Pienso que el análisis debió ser más amplio, más profundo y más complejo, y creo que los señalamientos y cuestionamientos de algunos de mis pares, indican claramente que esa es la situación que afrontamos”.