David Gutiérrez Fuentes | Capital de México | 21 de octubre de 2015.
Ante la postura del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) de no retrasar el Apagón Analógico en todo México para el 31 de diciembre, son todavía muchas las aristas con respecto a lo que pasará con los televisores que se desechen.
Apenas que en junio que se presentó el Programa Nacional para la Gestión Integral de los Televisores Desechados por la Transición a la Televisión Digital, en el cual se considera al tubo de rayos catódicos que contienen los antiguos televisores, como el componente más riesgoso para la salud humana y ambiental por contener materiales tóxicos como plomo, mercurio y cadmio.
Alethia Vázquez, profesora-investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) campus Azcapotzalco, considera que pese a los esfuerzos, aún hay muchas deficiencias en el tratado de los residuos que ponen en riesgo al medio ambiente.
Aunque hay cierto nivel de reciclaje de algunos componentes del televisor que son útiles y que tienen mercado, como los circuitos y cables, la falta de empresas recicladoras del resto de los componentes, pues un manejo erróneo de los desechos generarían hasta 19 mil 615 toneladas de óxido de plomo.
Pese a que la iniciativa federal habla del almacenamiento de los televisores, no se menciona lo que pasará con los tubos de rayos catódicos, pues si se les considera como residuos peligrosos tendrían un costo muy elevado para su manejo, el cual tampoco está claro quién lo cubriría.