vía Milenio
Las modificaciones a ley en materia de energía, la incertidumbre que generan los cambios de administración pública y políticas fiscales que no incentivan la inversión privada, son factores que generan atrasos a las empresas para que puedan realizar contratos con firmas proveedoras de servicios de Tecnología de la Información y Comunicación (TIC) y telecomunicaciones, alertan algunos expertos.
“Los retrasos si se están produciendo desde el año pasado y el anterior. Hay una parte que es derivada de la coyuntura económica, y luego otra que es por una decisión estratégica”, comentó José Andrés García, VP Regional para Iberia & Latinoamérica Denodo Technologies. Entrevistado por MILENIO, José Andrés García comentó que los cambios macroeconómicos que se están dando, tanto a nivel mundial como a nivel local, impactan de manera directa e indirecta a las empresas que trabajan en el sector del sector.
“Serán coyunturas en todo caso temporales, si lo vemos en un mediano – largo plazo, el crecimiento es indudable, es si o si, el mensaje es la virtualización (…) Se va a perpetuar seguro en 6 meses o en tres años, dependiendo de toda la coyuntura”, dijo. Por una parte, la reforma en materia de energía hace que muchas de las empresas de dicha industria tengan que posponer de manera indefinida sus planes para la adquisición de productos tecnológicos; pues se desconoce el impacto que puedan darse en la materia y las repercusiones que tomen las empresas para afrontar los cambios.
En América Latina, el mercado de las TI mostró un crecimiento del 8.5 por ciento durante 2021, lo que refleja la importancia del sector en el desarrollo económico de los países de la región. IDC, firma de análisis de la industria, informó que para 2022 el crecimiento será aproximadamente del 9.4 por ciento en el mercado empresarial (exceptuando el mercado de consumo), cifra que destaca en sus “10 predicciones” para los próximos años. Ricardo Villate, vicepresidente de Grupo de IDC para Latinoamérica, explicó que este desarrollo se ha dado porque la industria de TI continúa siendo un motor económico. Incluso, ha apoyado en otros sectores de mercados verticales a que las TI modifiquen e impulsen procesos de negocio. Coincidiendo con el tema, Manuel Apon, partner en Seidor México, consultora especializada en asesoría y servicios empresariales, dijo que otro elemento de atraso es el lineamiento que tienen que hacer las empresas con las nuevas legislaciones locales Con lo anterior, los cambios legislativos y de administración pública “si afectan el rubro de la tecnología”, sin embargo, la velocidad con la que se mueve la misma industria también se permite una rápida adaptación de las organizaciones.
“Las reformas tiene un impacto en nuestra economía, pero nosotros las vemos como coyuntural. A nosotros nos afecta de momento, pero una vez que estas se normalicen generan muchas oportunidades, sobre todo en tecnología”, apuntó Apon.