A más tardar el próximo 30 de septiembre, 477 estaciones de televisión abierta de baja potencia que siguieron transmitiendo después del apagón analógico en diciembre pasado, deberán realizar transmisiones digitales.
La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) se prepara para la entrega de alrededor de 100,000 televisores digitales en las zonas que quedaron pendientes y notificar al Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), y que éste proceda a ordenar los apagones.
Recientemente, Mónica Aspe, subsecretaria de Comunicaciones de la SCT, dijo que la dependencia va a terminar en “los tiempos de ley, esto es con el tiempo que le permita al IFT proceder para los apagones. Ya se tiene los equipos para tener este último apagón”.
El año pasado, el IFT emitió el Programa de Continuidad para las estaciones y equipos complementarios de baja potencia de televisión, cuyo objetivo es establecer los términos para que las que continúan realizando transmisiones analógicas dejen de hacerlo.
Las estaciones de baja potencia o equipos complementarios de zona de sombra contemplados en el acuerdo aprobado por el pleno no podrán continuar realizando transmisiones analógicas de televisión con posterioridad al 31 de diciembre del 2016.
La Unidad de Medios y Contenidos Audiovisuales del instituto será la encargada de determinar los apagones de las estaciones de baja potencia señaladas, una vez que la SCT informe que se alcanzó un nivel de penetración con receptores o decodificadores aptos para recibir transmisiones digitales en al menos 90% de los hogares de escasos recursos definidos por la Secretaría de Desarrollo Social, y se cuente con la validación de que ya se realizan transmisiones digitales.
Según el IFT, las estaciones comerciales de baja potencia no representan en términos de población algo considerable, pues darán servicio a cuando menos 3% de la población.
