vía Reporte Índigo.
La promesa de integrar una red bancaria a través del Banco del Bienestar hasta en las zonas de más difícil acceso en el país aún no se materializa, pero para alcanzarla el Gobierno federal está cambiando la estrategia.
La construcción de sucursales bancarias en todo el país no es una tarea sencilla y mucho menos barata y de eso se está percatando el Gobierno federal en su objetivo para edificar las del Banco del Bienestar.
La promesa de construir dos mil 700 sucursales del Banco del Bienestar durante 2020 y 2021 que hizo la administración de Andrés Manuel López Obrador a principios del año del “Gran Confinamiento” no se cumplió en el periodo prometido y no hay certeza de que se concrete este año.
Para subsanar la ausencia de infraestructura bancaria gubernamental el presidente López Obrador, informó que Telecomm Telégrafos operará como uno de los principales corresponsales bancarios del país a través de sus mil 700 sucursales.
“No saben lo que cuesta poner las sucursales, no sólo es dinero. Las sucursales las está construyendo el Ejército, los ingenieros militares, cinco millones de pesos la construcción, y llevan como mil 400 terminadas, vamos avanzando muy bien. Lo que cuesta es que se necesita la comunicación de internet y no hay, entonces estamos resolviéndolo para que los cajeros de estas sucursales puedan funcionar con seguridad”, detalló el presidente.
En aquel momento, el Ejecutivo federal dijo que el Banco del Bienestar se dedicaría, en una primera etapa, a dispersar recursos de los programas de desarrollo social, que de acuerdo con datos del mandatario, son 450 mil millones de pesos y podría alcanzar hasta 700 mil millones de pesos.
Telecomm Telégrafos, a través de sus mil 700 sucursales, se encargaría de emitir cuentas de ahorro formal, Créditos a la Palabra y Tandas para el Bienestar, así como la recepción de remesas y centros de atención para migrantes, lo que la transformaría en Financiera para el Bienestar.
Fue en julio de 2019 cuando el Gobierno federal publicó el decreto para la creación del Banco de Bienestar, para promover y facilitar el ahorro, el acceso al financiamiento en condiciones equitativas, la inclusión financiera, el uso y fomento de la innovación tecnológica a fin de procurar mejores condiciones a los integrantes del sector bancario.
En aquel momento el mandatario señaló que junto con el Banco de Bienestar se desarrollaría una empresa pública de telecomunicaciones e internet con el objetivo de “comunicar al país”, además de utilizar esta conectividad para las sucursales.
Retraso en inclusión del Banco del bienestar
Mientras la información en torno a la infraestructura física del Banco del bienestar es poco clara y el retraso en la construcción de las sucursales evidente, la integración de los mexicanos a productos financieros formales retrocedió ligeramente entre 2018 y 2021, de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2021.
Hasta el año pasado 56.7 millones de personas contaban con un producto financiero, ya sea cuenta de ahorro formal, crédito, seguros o Afore. Esta cifra representa 67.8 por ciento de la población total de entre 18 a 70 años y 0.5 por ciento menos de los contabilizados en 2018.