El pasado lunes el comisionado del Instituto Federal de Telecomunicaciones, Adolfo Cuevas, alertaba sobre la grave decisión de autorizar a Telcel adquirir el 35% -60 MHz- de la banda de 2.5 GHz concesionados a Grupo MVS. Ahora, el Instituto de Derecho de las Telecomunicaciones (Idet) hace lo propio, señalando que la decisión es contraria a generar un clima de competencia en telecomunicaciones.
A partir de la autorización del Ifetel, dice Idet, la configuración de espectro por operador quedará de la siguiente manera: Telcel pasará de contar con 41% de las frecuencias asignadas a tener más de la mitad (51%), AT&T quedará en (antes tenía 38%), mientras que Movistar bajará de 20% a 16% y otros servicios de acceso inalámbrico alcanzarían 1%.
Anteriormente, el mismo Ifetel a dio Telmex ganador de la licitación de la banda AWS, considerando las frecuencias que actualmente se encuentran asignadas a los operadores de servicios. “El llamado operador preponderante que supera la barrera de 50% en contabilidad de Unidades Generadoras de Ingresos, llegando a 60.8% actualmente, rebasará también la barrera de 50% en la acumulación de la totalidad del espectro disponible para toda la industria.
Con este escenario de concentración de espectro radioeléctrico por parte de Telmex, para el Idet es imposible no advertir la generación de ventajas y consecuentes barreras para la gestación de competencia efectiva, al tratarse de un operador que podrá gozar en exclusiva de los derechos para explotar la banda de 2.5 GHz por al menos dos años antes que sus competidores; frecuencias del espectro óptimas para la oferta de servicios móviles avanzados (4G-LTE).
Se trata de una ventaja permanente que el agente preponderante obtiene, no obstante que los competidores actuales o algún nuevo jugador pudieran tener acceso a la explotación de frecuencias en esta banda dentro de dos años, conforme a la estimación del propio Ifetel.
INVESTIGACIÓN. Después de la pulcra investigación de la Comisión Federal de Competencia Económica, que lleva Alejandra Palacios, en donde multó con más de mil millones de pesos a cuatro afores que se coludieron para manipular el mercado de pensiones, la gente se pregunta dónde estaba Carlos Ramírez, director de la Comisión Nacional de Ahorro para el Retiro.
La Consar en su calidad de responsable de coordinar y vigilar el funcionamiento de las diferentes Afores que operan en el país, permitió que Profuturo GNP, Sura, XXI Banorte y Principal y por lo menos 11 personas físicas cometieran prácticas monopólicas absolutas.
El tema que señala a Carlos Ramírez es que para facilitarles esta forma de “no robarse clientes” modificó las reglas operativas a fin de que las Afores, que así lo quieran, obliguen a sus clientes a tramitar un “permiso” para poder cambiarse de Afore.
Cabe mencionar que Ramírez, proviene del sector financiero ya que fue alto funcionario de Banorte, pero no se vale que se aproveche del cargo que tiene ahora para beneficiar a empresas particulares perjudicando a los trabajadores.