Analistas coincidieron en que durante los tres primeros años del gobierno las telecomunicaciones han avanzado con claroscuros.
“Ha habido claroscuros, buenas cosas, malas cosas y en algunas cosas seguimos igual”, señaló Irene Levy, presidenta de Observatel.
Durante la actual administración, que comenzó en 2012, se promulgaron cambios en la Constitución en telecomunicaciones y radiodifusión hace dos años y hace un año entró en vigor la nueva Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión.
Levy comentó que se ha avanzado desde la reforma constitucional, aunque no se tradujo en lo que muchos esperaban. Agregó que se ha visto una baja en precios de servicios de telefonía fija y móvil, pero no en televisión de paga.
“El subsector que menos ha avanzado desde la reforma es el de televisión de paga, que se ve aún más concentrado a partir de la reforma y el de telefonía móvil tiene un nuevo aire a las inversiones con la entrada de AT&T”, destacó la presidenta de Observatel.
En materia de calidad dijo que hay mucho por avanzar e incluso mencionó que hay retrocesos, mientras en lo social, en televisión pública “quedaron a deber”.
Gabriel Sosa Plata, analista en telecomunicaciones, coincidió en que el balance en materia de telecomunicaciones en esta administración ha sido de claroscuros.
“A tres años el status quo del sector de la radiodifusión y de las telecomunicaciones sigue igual, pero pudiese transformarse en los años siguientes si el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), particularmente, es mucho más agresivo para generar un esquema de competencia mayor y fortalecer los derechos de usuarios y las audiencias de televisión”, expresó.
Víctor Pavón Villamayor, presidente ejecutivo de Oxford Competition Economics, dijo que el mayor reto del IFT es “iniciar un proceso de evaluación ‘ex post’ de sus decisiones regulatorias, que permita evaluar el impacto en los mercados de sus resoluciones”.
