vía Vanguardia.
El asistente de voz ha dejado de ser una prioridad para la compañía: su división tiene decenas de millones de pérdidas porque los usuarios sólo los usan para poner música
Mientras muchos usuarios le piden a Apple que Siri se parezca más a Alexa, no parece que en Amazon estén demasiado contentos con el desarrollo de negocio de su asistente de voz. De hecho, según se desprende de las informaciones de Business Insider, es un completo desastre y la compañía no encuentra la manera de reformular Alexa para que sea rentable.
Son momentos complicados para Amazon. La multinacional está llevando a cabo la mayor ronda de despidos de su historia y espera recortar miles de puestos de trabajo a corto y medio plazo. Una de las divisiones que será víctima de estas reducciones será la que se encarga de Alexa, que desde que salió al mercado en 2014 no ha logrado convertirse en una fuente de beneficios para la compañía. Aunque se han asentado en muchos hogares, los usuarios se cansan rápidamente del asistente, que además ha estado en el centro de varias polémicas relacionadas con la privacidad.
La clave
No se pueden monetizar sus funciones
La realidad es que Alexa es un agujero negro para Amazon. El asistente de voz forma parte del grupo Worldwide Digital de la compañía, que perdió 3.000 millones de dólares solo en el primer trimestre de 2022 por culpa de Alexa y otros dispositivos que han pasado sin pena ni gloria. Si sigue a este ritmo, esta división acabará perdiendo 10.000 millones de dólares al finalizar este año según Insider. Es decir, que Alexa es una máquina de perder dinero, mientras que los dispositivos Echo, otro de los artilugios más cacareados, han pasado de puntillas desde su lanzamiento. Lee también
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El principal problema que plantea Alexa para Amazon es que no da dinero a largo plazo. Es un dispositivo que se compra a precio de coste y, en este preciso momento, deja de ser rentable para la compañía. No se monetizan sus funciones y es de esperar que nadie quiera pagar si los únicos usos que tiene son poner música o informar sobre el tiempo.
En Amazon ya intentaron buscar soluciones. Por ejemplo, trataron de que los clientes hicieran compras a través de los comandos de voz. Buscaron asociarse con conocidas cadenas de comida para poder pedir pizzas por voz o hacer compras de otros productos. En 2020 retiraron esta posibilidad porque nadie utilizaba esta función. De hecho, Amazon es consciente de que los usuarios no sacan todo el jugo al asistente. Pese a recibir “mil millones de interacciones a la semana” prácticamente todas hacen referencia a cosas triviales o peticiones muy básicas. Así que no hay margen de maniobra para poder monetizar al asistente.
Agujero negro
Millones de dólares en pérdidas
Insider habló con más de una docena de empleados actuales y antiguos del equipo de hardware de la empresa para obtener una radiografía más aproximada de lo que sucede en ese departamento. Uno de los empleados que ha hablado con Insider, bajo condición de anonimato, ha asegurado que Alexa es “un fracaso colosal de la imaginación” y “una oportunidad perdida”.
Al parecer, es una “división en crisis” tras los malos resultados. No son nuevos, ya vienen de lejos. En 2018 ya había perdido 5.000 millones de dólares. Y en 2019 se intentó poner remedio. David Limp, vicepresidente Senior de Dispositivos y Servicios, reconoció que estaban preocupados, pero que al mismo tiempo vaticinó “un futuro muy, muy brillante” para el asistente. Con la perspectiva que da el tiempo, no ha sido así. Lee también
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En Amazon siempre han sido comprensivos con las pérdidas de Alexa, pero esto ha cambiado. El asistente de voz siempre fue uno de los proyectos favoritos de Jeff Bezos, fundador y antiguo CEO de Amazon. Así que el dispositivo estaba protegido. En cambio, Andy Jassy, el actual CEO, no está dispuesto a seguir perdiendo dinero con el asistente. Como cuenta Insider, el asistente no desaparecerá y Jassy seguirá intentando rentabilizarlo, pero no hay ningún plan específico para conseguirlo y ni siquiera es una prioridad.
La guerra de los asistentes
Google Assistant y Siri están por delante
A Alexa tampoco le va bien en la batalla con otros dispositivos similares. En Estados Unidos, Google Assistant lidera actualmente la clasificación con 81,5 millones de usuarios, seguido de Siri con 77,6 millones de usuarios, tal y como informa Insider Intelligence. Para desgracia de amazon, Alexa ocupa el tercer lugar con 71,6 millones de usuarios.Lee también
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No obstante, los problemas con los asistentes de voz no se circunscriben únicamente a Amazon. En Google también se enfrentan a problemas similares y por motivos muy parecidos: son incapaces de monetizar las tareas que hace el Google Assistant. Todo lo que han intentado, como poner anuncios, no ha dado ningún fruto comestible. Así que tecnológica ha preferido no complicarse demasiado y ha comenzado a recortar recursos de esta área.
Apple tuvo algo más de suerte dando con el modelo de negocio correcto con el HomePod. Pero el dispositivo también murió al no calar en los usuarios. En la actualidad se puede conseguir una versión más pequeña y barata, pero no es algo demasiado relevante para la compañía de Cupertino, que sigue teniendo en Siri un reclamo para hacer nuevos clientes.