Miriam Posada | La Jornada | 19 Abril 2016
Ninguno de los mercados de América Latina ha alcanzado el 50 por ciento de los mil 300 megahercios de espectro a disposición del mercado, sugeridos para el año 2015 por la Unión Internacional de Telecomunicaciones, lo que limita el desarrollo de los servicios de telecomunicaciones móviles e impacta a los usuarios finales, señaló la agencia 5G Américas que concentra a las principales empresas del sector y fabricantes de equipos.
México ha puesto a disposición del mercado apenas 24.2 por ciento del espectro sugerido. Detalló que sólo cuatro países de la región han asignado más del 30 por ciento de la sugerencia de la UIT para 2015 que son Argentina con 31 por ciento, Brasil 41.7, Chile 35,8 y Nicaragua 32.3 y todos adjudicaron la banda de 700 Mhz.
Hay tres mercados por debajo del umbral del 20 por ciento El Salvador, Guatemala y Panamá.
“La carencia de espectro suficiente para el desarrollo de los servicios móviles impacta negativamente a los consumidores, que se ven privados de servicios innovadores con un funcionamiento óptimo, y a la vez, limita el potencial de crecimiento de la industria de telecomunicaciones”, explicó José Otero, Director de 5G Americas para América Latina y el Caribe.
Destacó que as frecuencias de espectro son necesarias para que el desarrollo tecnológico pueda materializarse en servicios que beneficien a la sociedad, satisfaciendo las necesidades crecientes de banda ancha, un servicio considerado fundamental para el progreso económico de las comunidades.
“Los reguladores de América Latina deben seguir siendo diligentes en la comprensión de la importancia que tiene para sus ciudadanos hacer disponible más espectro para el mercado, con el fin de impulsar el crecimiento económico y la conectividad global en su país. Afortunadamente, los gobiernos de algunos países ya están incrementando esfuerzos en este sentido, al darse cuenta de que el espectro es un ingrediente clave para el desarrollo y progreso de la sociedad, así como el agua, el alcantarillado y las carreteras lo han sido en el pasado”, concluyó Otero.