A casi una década (nueve años) de la definición y aplicación de medidas de regulación asimétrica en el sector de telecomunicaciones en México son escasos sus efectos en términos de gestación de competencia efectiva, especialmente en los mercados de telefonía y banda ancha móvil. Los principales indicadores revelan que la estructura se ha mantenido prácticamente similar o incluso se ha reconcentrado a favor del agente económico preponderante en telecomunicaciones (AEP-T), América Móvil.
Este es el caso de las ganancias o EBITDA (utilidad bruta de la empresa antes de la deducción de impuestos, depreciaciones y amortizaciones) del AEP-T, variable financiera que traza una trayectoria ascendente en el último lustro que llega a $35,212 millones de pesos (mdp) al finalizar 2022, cifra superior a cuando fue declarado AEP-T (marzo de 2014) y que duplica el monto acumulado por sus principales competidores ($17,363 mdp) [AT&T, Axtel, Grupo Televisa, Megacable, Telefónica y Totalplay].
Implicaciones sobre la Estructura del Mercado. La instrumentación y cumplimiento parcial de la regulación asimétrica se ha traducido en una incapacidad para rebalancear la generación de ganancias entre operadores y gestar condiciones equilibradas para expandir su infraestructura, incrementar las capacidades de sus redes y mejorar la calidad de sus servicios.
La persistencia de la generación de ganancias extraordinarias para el AEP-T y de un marcado desbalance con sus competidores continúa habilitando ventajas para aquel frente a estos. Por ejemplo, en tenencia espectral, desarrollo de infraestructura, acuerdos de exclusividad con fabricantes de equipos, entre otras condiciones disímiles para la competencia efectiva entre operadores.
Ganancias Excedentes del AEP-T. Desde el primer trimestre de 2014 (1T-2014), periodo en el que fue declarado AEP-T, al cuarto trimestre de 2022 (4T-2022), este operador registra un acumulado de ganancias de $966.9 mil millones de pesos (mmp), un margen de 37.7% con respecto a sus ingresos. Mientras que sus principales competidores alcanzan un agregado de $381.4 mmp, cifra que equivale a un margen de 24.3%.
Si el AEP-T registrara el margen promedio ponderado del mercado (32.6%), su EBITDA habría sido de $837.2 mmp durante el periodo referido. El diferencial de $129.7 mmp con respecto a las ganancias realmente generadas pasaría a sus principales competidores, quienes obtendrían un acumulado de $511.1 mmp.
En otras palabras, el AEP-T ha obtenido un excedente de ganancias equivalente a $129.7 mmp entre el 1T-2014 y el 4T-2022. Este monto representa prácticamente la mitad (51.5%) de los recursos necesarios para conectar a toda la población en México, estimados por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU por sus siglas en inglés) [bit.ly/3Ezs5bC].
Si estas ganancias extraordinarias se hubieran dedicado a expandir la conectividad muy probablemente nos aproximaríamos a la mitad del camino en tiempo o inversión requerida para erradicar la brecha digital en nuestro país. No obstante, la falta de competencia ha ocasionado que el AEP-T se apropie de estos recursos para sí mismo, contenga sus inversiones y sacie sus fines rentistas.
En la próxima revisión de la regulación asimétrica puesta a consulta por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) debe poner especial atención a otros indicadores distintos a la contabilidad de usuarios sectoriales, como es el caso del EBITDA. Este evidencia la ineficacia del marco regulatorio no sólo para nivelar las ganancias obtenidas por los operadores, sino para gestar verdaderas condiciones para la competencia efectiva en las telecomunicaciones de México.