2019-12-26
Una demanda de la población es el agua, recurso vital para tener una vida digna y saludable. Hoy este derecho humano universal es garantizado a partir del e-Gobierno, que, apoyado por el uso de Tecnologías de la Información y la Comunicación, permite a la comunidad de la Colonia Dolores Otero en Mérida, Yucatán conocer y hacer uso de agua limpia y potable.
Este es precisamente un ejemplo de la función que debe tener el e-Gobierno, a saber, proveer de servicios públicos a través de plataformas tecnológicas para la satisfacción de derechos ciudadanos de manera más eficiente y efectiva.
La iniciativa #SmartWater forma parte de los esfuerzos del gobierno que habilitan el acceso a información sobre la calidad del agua para su consumo óptimo, vía una solución de Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés).
El proyecto, que tiene por anfitrión al Estado de Yucatán y a la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán (JAPAY), instaló sensores inteligentes que permiten, en tiempo real, el monitoreo de diversos parámetros clave de calidad del agua. Esta información es recolectada en un tiempo 80% menor que a través del muestreo tradicional. De esta manera, en tan sólo tres días se obtienen más de 2,000 muestras y es transmitida al staff del organismo público a través de redes 4G de manera inmediata.
Esta buena práctica de gobierno electrónico permite a las autoridades no sólo mantener un monitoreo constante, sino realizar acciones correctivas inmediatas ante circunstancias que pudieran afectar la potabilidad del agua.
Pero la iniciativa no se detiene ahí, hace correspondencia con el e-ciudadano. Con ayuda de la aplicación Dime H2O y redes 4G se difunde a la comunidad de la Colonia Dolores Otero en Mérida el Índice de Calidad del Agua, el cual se expresa en forma de un semáforo simple. Esta herramienta permite a los ciudadanos ser vigilantes de la calidad del agua que distribuye la JAPAY: el e-ciudadano se vuelve el elemento y beneficiario central en un ejercicio del e-Gobierno.
Una de las fortalezas de este proyecto consiste en no dar por hecho que la entrega de tecnología hace al ciudadano un e-ciudadano instantáneamente. Reconoce la necesidad de alentar la participación comunitaria en actividades educativas que promuevan un uso óptimo de la aplicación móvil y los teléfonos inteligentes que la tienen instalada, mientras se profundiza en el conocimiento sobre cultura del agua.
Estas campañas lograron que las personas que participaron en el proyecto #SmartWater incrementaran su confianza sobre la calidad del agua, a la vez que recibieron conectividad móvil y dispositivos inteligentes que habilitaron el acceso, de manera ubicua, a la información del Índice de Calidad.
En Yucatán, centro de innovación y aprovechamiento tecnológico, se ha sentado un precedente de una pionera iniciativa: #SmartWater. Ello demuestra la misión que debe tener el e-Gobierno y su efectividad ante el e-ciudadano.
Cabe reconocer que esta iniciativa no pudo ver la luz sin esfuerzos provenientes de la iniciativa privada, las organizaciones de la sociedad civil y el gobierno y amerita enfatizar que la acción colaborativa resulta, siempre, en impactos sociales profundos y en la plena satisfacción de derechos humanos.
