Las plataformas de vídeo bajo demanda se verán sometidas a las mismas reglas que los organismos de radiodifusión, teniendo que garantizar un 20% del contenido.
Los reguladores europeos planean obligar a las empresas de servicios de streaming de vídeo, un mercado dominado por competidores estadounidenses como Netflix y Amazon, a ofrecer más programas de televisión y películas europeas, según fuentes de The Financial Times.
Un borrador de una propuesta de la Comisión Europea, previsto para ser anunciado la próxima semana, someterá a las plataformas de vídeo bajo demanda a las mismas reglas que los organismos de radiodifusión, teniendo que garantizar que el 20% del contenido que emitan sea de origen europeo.
Netflix ha expresado su preocupación y ha advertido a Bruselas que imponer una cuota numérica rígida puede acabar con el mercado de los servicios de medios audiovisuales a la carta. “El enfoque de la política comunitaria debe estar en incentivar la producción de contenidos europeos y no en imponer cuotas“, ha expuesto la compañía, según ha recogido el diario financiero.
La propuesta se dará a conocer como parte de una amplia gama de medidas destinadas a crear un mercado paneuropeo de servicios digitales. Entre los planes, la Comisión introducirá normas que prohíban el denominado “geoblocking”, la táctica por la que las empresas tratan a los consumidores que utilizan el mismo servicio de manera diferente dependiendo de su país de origen.