Adrián Arias | 6 de Noviembre 2015 | La Crónica de Hoy.
El capítulo de telecomunicaciones del Acuerdo Transpacífico (TPP) plantea una serie de obligaciones para regular a las empresas dominantes, principalmente a las de telefonía, que incluyen la desagregación de su infraestructura y la eliminación de prácticas monopólicas. No obstante, el acuerdo exenta de varias obligaciones a las empresas de radiodifusión y televisión por cable.
El texto difundido por la Secretaría de Economía señala que cada país integrante del acuerdo garantizará que los proveedores dominantes en su territorio otorgarán a otros proveedores de servicios de telecomunicaciones, provenientes de otro país integrante, “un trato no discriminatorio, bajo circunstancias similares a sus subsidiarias y filiares”.
El acuerdo señala que no se aplicarán las medidas planteadas a las empresas de televisión por cable y de radiodifusión, a excepción del apartado que plantea el acceso a los servicios públicos de telecomunicaciones y las obligaciones en materia de transparencia. “No se podrá exigir a cualquier empresa dedicada exclusivamente a la distribución de contenidos por cable o radiodifusión a poner a disposición sus instalaciones como una red pública de telecomunicaciones”, detalla el texto.
El TPP plantea que las empresas dominantes en telecomunicaciones, que en el caso de México serían Teléfonos de México (Telmex) y Telcel, deberán permitir el acceso a su infraestructura de manera desagregada y sin discriminación para cualquier otro proveedor de telecomunicaciones. Las tarifas que aplicará la empresa dominante para el acceso a su red, deberán estar basadas en costos, “deberán ser razonables y transparentes”.
El documento también plantea que las autoridades reguladoras del sector de cada país, deberán ser autónomas e independientes y sin nexos con sus regulados, además de que se instalará un comité para dar seguimiento al cumplimiento del TPP en telecomunicaciones.
